- El derecho a la información sufre un duro revés con este desenlace.
- Entretención ¿único destino predecible del periodismo subordinado al poder?
En el desenlace de “Corazón Valiente” la épica producción cinematográfica de la revolución escocesa protagoizada por Mel Gibson el siglo pasado (1995), William Wallace tiene su boleta de libertad, supuestamente, para evitar ser decapitado con solo gritar “misericordia, viva el rey”. Así salvaría la vida, dice el guión de aquel relato. Wallace prefiere el suplicio y es inmolado. ¿Quién es qué en el periodismo y en donde fuere, para decirle a Julián Assange que debió hacerlo así, después de catorce años de abandono de la profesión creada para luchar por la verdad pública?. Assange tiene que pensar ahora como lidiar con la peor cárcel para un periodista verdadero, la autocensura.
“Misericordia” siguen pidiendo para Assange sus abogados, al rey de las morales camaleónicas a conveniencia y que se proclama el paraíso de la libertad soñada para todos quienes se sometan a sus condiciones y necesidades. Los criminales de guerra todos libres e impunes con certificado de honor por aquel establecimiento y el periodista solitario que simbolizó una esperanza de paradigma para la profesión, condenado por confesión de culpabilidad de espionaje como estrategia única para su libertad y preservar su vida.
Hace 32 años Gabriel García Márquez fundó un taller de periodismo televisivo llamado QAP que sería escuela de genuinos periodistas. El antiperiodismo colombiano mediático está caracterizado hoy por nombres surgidos de aquel experimento taller. Dos años después, García Marquez creó una Fundación de Nuevo Periodismo que celebró esta semana sus treinta años formando miles de jóvenes periodistas en Iberoamerica en los principios éticos que nunca traicionó en el más bello oficio como repitió siempre el más importante creador literario de Colombia. Miles de esos periodistas luchan con toda su capacidad por defender la libertad de prensa, el derecho a la información de todos. Ojalá ninguno esté en la línea de las mascotas del poder que salieron del taller televisivo.
En el mismo inicio de aquer taller de García Marquez, en el otro canal, en la época en que el gobierno repartía noticieros por apellidos, dinastías partidistas a hijos de expresidentes, Juan Gossaín con su socio Amat fundaban el único noticiero que sobrevive a esa época. Gossaín había prometido hace algunos años que se dedicaría a impulsar una cruzada nacional por la salvación del periodismo. Ver la realidad tal cual se vive, creo que es uno de los males graves que agobia al periodista caribe que seguía el mismo derrotero de la utopía de García Márquez. El periodismo mediático, corporativo, industrial y de grupos económicos, nada tiene que ver con ninguno de los legados referidos a propósito de la suerte del periodismo simbolizada en el caso Assange. Sometimiento al poder. Coptación y subordinación.
Muchas aristas sobre el significado de lo sucedido con el hecho del año para el periodismo en su grave incertidumbre y crisis mediática de confianza en toda la aldea global. Assange está con su familia, con vida, en presunta libertad a bordo de la peor cárcel autoimpuesta por un periodista de esencia y conciencia, declarado culpable de un delito no cometido y sometido a autocensura. El signo de los tiempos para un periodismo que pareciera condenado a convertirse en bufón de un poder concentrado inmisericorde que lo deja jugar para que distraiga a la masa con goles, pasarelas y chismes de farándula. Las intrigas políticas que envenenan la democracia es la otra asignatura que ordena el poder a periodistas contratados para tales fines. “Sin medios nos iría mejor y tendríamos menos guerras” sentenció Assange rumbo a su nueva cárcel.
Opinión Acto Editorial escrito por Hernando Ayala M Periodista colombiano.
E Mail disnnet@gmail.com
Respetado Columnista:
Gracias, por acercarnos claramente acerca de la situación de Julián Assange.
Con argumentos válidos y sólidos nos expone la realidad de los Comunicadores Sociales y Periodistas, y ese vínculo directo o indirecto con el poder político. , ese vínculo directo con la sociedad en general.
En la entrevista al Director de El Opinadero, Periodista Luis Fernando Cardona Gutiérrez el día 29 del presente mes, por el canal Telecafe, expresó :
» Decir la verdad en una sociedad que prefiere escuchar mentiras.»
Ustedes , respetados escritores_columbistas: nos ofrecen investigación, rigor , objetividad.
Es por ello que acceder a sus columnas es abrir un universo de conocimiento diversos.
Y en un texto de la universidad Jorge Tadeo Lozano, titulado : «Derecho de las Comunicaciones. «, expone:
_ » La Libertad de pensamiento y de conciencia constituye de hecho la más extensa de las libertades humanas.»
_ » La Libertad de expresión no es, ni mucho menos, una libertad para beneficio de los periodistas y comunicadores sociales.»
En sintonía. Es un honor poder aportar en el camino hacia la verdad pública. Saludos.