Cada año que inicia se hacen gran cantidad de promesas y propósitos, unos alcanzables y otros no, pero sin lugar a duda el más codiciado es el de bajar de peso a toda costa, como si el solo decirlo fuera suficiente para que dicho deseo se haga realidad.
Y es que disminuir esos kilos de más es un estado que de por si no se debe tomar a la ligera ya que las soluciones tanto médicas como no médicas no se dan de la noche a la mañana.
Si bien el tema es bien extenso empezaremos por decir que la obesidad es una enfermedad metabólica que afecta muy especialmente al mundo occidental y sus cifras cada vez se incrementan de manera vertiginosa; por eso su manejo y tratamiento no debe ser tomado a la ligera ya que esta se asocia o pone de manifiesto otros trastornos crónicos como la diabetes, la hipertensión arterial, alteraciones en los niveles de colesterol y triglicéridos por mencionar algunos que pueden aumentar notablemente el riesgo cardiovascular pero también existen un sin número más de enfermedades que se ven agravadas por dicha situación, por citar alguna digamos que todos aquellos padecimientos osteoarticulares que tanto limitan e incapacitan al individuo.
La obesidad es un exceso de grasa que origina un aumento de peso corporal con respecto a lo que corresponde a la talla, raza, sexo, edad y otra serie de factores socioculturales de cada persona en particular y de una trascendencia vital que puede manifestarse en diferentes épocas de la vida dando lugar a importantes consecuencias psicoafectivas, sociales y sanitarias generando graves problemas de tipo social, familiar, afectivo, profesional, laboral e interpersonal.
Esto hace que hoy en día se considere como una enfermedad crónica y no solo como un trastorno estético y hace necesario que se hagan tratamientos más serios basados en conocimientos científicos no empíricos donde se realice un manejo integral que incluya primero que todo una muy buena valoración médica creando un programa de ejercicio físico bien direccionado, normas de alimentación ajustadas a las necesidades y las capacidades de cada individuo y del medio en que vive, modificación de hábitos de conducta y terapia biológica en los casos que se requiera sin olvidar los procedimientos de tipo quirúrgicos que estarán a cargo del especialista correspondiente.
Realizar dietas para bajar de peso se ha constituido en toda una moda comenzando por las más absurdas hasta las más milagrosas que combinadas con una serie de productos de una publicidad engañosa y simplista, hacen que esta enfermedad tenga todo el terreno abonado para especulaciones lucrativas y es que no debemos olvidar que estamos en la época del culto al cuerpo físico. Existen también factores que influyen en la prevalencia de la obesidad como lo son la edad y sexo, sabemos que es más frecuente en el sexo femenino y también en las personas de edad, aunque realmente todos estos parámetros han cambiado tanto que ya a cualquier edad la podemos encontrar mucho más dadas las condiciones de cómo nos alimentamos actualmente donde verdaderamente no tenemos ni la menor idea de la clase de alimentos son los que consumimos. El sedentarismo sin lugar a duda es uno de las situaciones más preocupantes ya que la falta de actividad física genera una disminución en la movilidad física y de la energía corporal agravando de por si otras enfermedades preexistentes. Recordemos que cada ser humano es un universo y como tal debe ser tratado y el manejo de la obesidad y el sobrepeso no son la excepción pues los conflictos psicoemocionales de diversas causas pueden perfectamente generar estrés, ansiedad y depresión por citar algunos y estos a su vez se ven reflejados en el consumo excesivo de comida por lo general mal balanceada y de preferencia la que más nos gusta, “la chatarra”, pues la verdad sea dicha en la mayoría de los casos no sabemos qué contenido nutricional tiene lo que comemos día a día.
Hablar de obesidad y sobrepeso es un tema de nunca acabar pero siempre debemos recordar que somos lo que comemos así que hagámoslo de la mejor y más saludable manera.
Muy interesante y acertada su opinión sobre este tema, mi querido doctor