Cine para El Opinadero – La excavación

Por GERMÁN A. OSSA E.

Esas firmas fabricadoras de películas y series para nosotros los puristas del cine, son temibles. Nos invitan mucho a la desconfianza. Pues a ratos se convierten en morbosas fábricas de cintas de todos los colores y pelambres, sólo para buscar la manera arbitraria y tramposa de hacer fortuna con las emociones y los sentimientos de los espectadores de todo el mundo, donde ese mercado abre sus ventas.

Netflix, Amazon…, ya suenan más que la Metro, Universal, Disney y hasta Pixar… Han hecho de todo, y entre tantas cosas, verdaderas obras maestras. Hasta películas que han ganado el Óscar de la Academia, que ya es mucho decir. Recuerden que Netflix le hizo a Alfonso Cuarón, ROMA, esa bellísima cinta en blanco y negro, que, siendo mexicana, se les subió a los hombros a los encopetados gringos de Hollywood en el Teatro Kodak el año antepasado.

Pero se dejan venir a veces con otras cosas buenas.  Por ejemplo, acabamos de ver una formidable cinta, que tiene fecha 2021 y que realmente nos asombró por más de una razón: “LA EXCAVACIÓN”. Excelente dirección (Simon Stone), impecable actuación (Ralph Fiennes, Lily James y Carey Mulligan), imponente fotografía y hermosísima y atinada música, ambientación impecable y una historia verdaderamente sorprendente.

Esta película, protagonizada por Carey Mulligan y Ralph Fiennes, cuenta la historia del descubrimiento de un enterramiento anglosajón en Sutton Hoo, en Suffolk, con el telón de fondo de la Segunda Guerra Mundial. Fue en Suffolk –y no en Egipto, Turquía o Grecia–, donde tuvo lugar uno de los descubrimientos arqueológicos más importantes de todos los tiempos. En 1939, en medio de la Segunda Guerra Mundial, una joven viuda llamada Edith Pretty contrató a un experto local para que desenterrara los montículos (túmulos) de su jardín en Sutton Hoo, creyendo que formaban parte de una antigua fosa común. Sin embargo, tal y como se muestra en ‘La excavación’, la nueva y brillante película de Netflix, lo que realmente encontraron fue un enorme barco anglosajón, posiblemente el lugar de enterramiento del rey Rædwald de Anglia Oriental.

Carey Mulligan interpreta a Pretty y Ralph Fiennes a su tímido pretendiente arqueólogo, Basil Brown, con un potencial romance que bulle entre los dos a medida que avanza la excavación (podría ser el primer romance arqueológico de la historia, a no ser que cuente La momia). Completan el reparto Lily James y Johnny Flynn, que interpretan a la arqueóloga Peggy Preston y al sobrino de Pretty, Rory Lomax, respectivamente; la película sugiere una relación romántica entre ambos, a pesar de que Preston está casada con el personaje de Ben Chaplin, Stuart Piggott.

En la vida real, el amor entre Pretty y Brown era platónico, y los dos nunca fueron pareja. Los presentaron después de que ella mencionara los montículos que había en su jardín al historiador Vincent Redstone, que la puso en contacto con Gus Maynard, del Museo de la Corporación Ipswich. Este le recomendó a Brown, a quien contrataron para trabajar en una excavación durante 15 días a razón de 30 chelines a la semana y alojamiento, una habitación que compartía con el chófer de Pretty.

Al cabo de unos días, descubrió los restos de 90 pies de un barco anglosajón, que se creía había sido enterrado junto a su rey. En su interior había valiosas piezas antiguas –muchas de plata y oro perfectamente conservadas– que databan del siglo VII. Como propietaria de la tierra, Pretty donó rápidamente todo el tesoro a la nación, y posteriormente se expuso en el Museo Británico. Sir Winston Churchill se ofreció a concederle el CBE por su contribución a la arqueología, pero ella se negó. Murió a los 59 años en 1942, mientras que Brown murió a los 90 en 1977.

Por su parte, los personajes de James, Peggy Preston, y de Ben Chaplin, Stuart Piggott, se conocieron mientras estudiaban Arqueología en el Instituto de Arqueología de Londres y se casaron en 1936. Sin embargo, la relación terminó en 1954 y Preston se casó con el arqueólogo italiano Luigi Guido en 1957, pero la pareja se separó en 1959. Más adelante, Preston y Piggott se reconciliaron, y ambos se visitaban con regularidad, e incluso ocuparon conjuntamente la presidencia de la Sociedad de Arqueología e Historia Natural de Wiltshire. Ella murió en 1994 y fue enterrada en el monumento de Silbury Hill, otro yacimiento prehistórico.

Un manjar para los amantes de la arqueología y una exquisita historia de amor, extraída de una exitosa novela basada en hechos reales, escrita por John Preston y publicada en 2007.

Altamente recomendable.

Admirable la actuación de Ralph Fiennes, nadie más y nadie menos que el hombre de “La lista de Schindler” (1993); “El paciente inglés” (1996); “El jardinero fiel” (2005) y “El gran Hotel Budapest” (2014).