Por VICENTE ZULUAGA OSORIO
1.Carlos Holmes Trujillo, el peor ministro de Defensa de los últimos años, quien sin sorpresa, porque ese es el uribismo, acaba de librarse de la moción de censura propuesta por los congresistas de la oposición, con una votación extravagante, y para volverlo a premiar ya figura, con Petro, como precandidato para el 2022. Como quien dice le va a tocar bailar con la más fea, pues Paloma Valencia y María Fernanda Cabal y Jerónimo Uribe Moreno aspiran a figurar como el que dijo Uribe, lo cual facilita la carrera presidencial de Camilo Romero, Iván Marulanda, Jorge Enrique Robledo, o Humberto De La Calle Lombana por la oposición, sólo que antes deberían escoger entre ellos el programa de gobierno, sugerencia del ex vicepresidente del elefante, y comprometerse a apoyar con sus votos a quien resulte escogido en una consulta .
2. En medio de la confusión, al salir del Ubérrimo, el preso número 1087-985 volvió a decir pendejadas como si creyera que puede seguir haciendo lo que le venga en gana con los colombianos, como si no se hubiera dado cuenta que según el Centro Nacional de Consultoría el 78% de los integrantes del censo electoral no votarán por “el que diga Uribe”, como quien dice ya perdió, y por eso, en su desesperación, gritaba a todo pulmón, en las afueras de su prisión: “Ojo con el 2022”, porque sabe que el 21 de octubre el paro nacional, con el apoyo de la Minga, hará tambalear al títere, como quien dice las otras bobadas que dijo, como el referendo para acabar con la Jep, reducir el tamaño del congreso y eliminar las Cortes para que no haya quien lo siga juzgando, distinto de la tinterilla que le regaló la libertad dizque porque nadie le dijo de qué lo acusaban, tendrán una esperita.
Olvida que el refrendo debe ser primero autorizado por el congreso si lo solicita, dentro de los seis meses siguientes a la promulgación, por lo menos el cinco por ciento de los ciudadanos que integran el censo electoral o sea un total de 7.200.000 y que se entenderá derogada la reforma por el voto negativo de la mayoría de los sufragantes, siempre que en la votación hubiere participado al menos la cuarta parte del censo electoral, es decir 9 millones. Quedará rechazada con 4.501.000, pero si la participación es del 50%, esto es de 18 millones, ese acto legislativo quedará derogado si la votación asciende a 9.000.001
Ahí sí todos los colombianos de bien, que son la mayoría, nos daremos la pela en la urnas porque no puede ser que una paz conseguida con tanto sacrificio, pese a las zancadillas que el sub presidente le ha puesto al acuerdo de La Habana, pues ha sido tacaño con la implementación, siga sufriendo tropiezos, aunque falta mucha verdad por confesar por los ex guerrilleros.
3. Estamos tan mal que hasta el Consejo de Estado ha dado su brazo a torcer, pues no tiene presentación que a última hora decida revocar el fallo de tutela del Tribunal Administrativo de Cundinamarca que le ordenaba a Duque suspender la presencia de soldados norteamericanos en nuestro territorio, que llegaron al país sin el visto bueno del Senado de la República.
4. No podía faltar el fiscal Barbosa, con su criminal conducta, con su descarada intervención solapada en defensa de sus intereses perversos. Ahora le dio por congelar el proceso penal que se adelanta contra Esteban Ramos, hijo de Alfredo Ramos, tan pronto como supo que el fiscal del caso, doctor Daniel Cardona, tenía lista la resolución de acusación y entonces convocó un comité jurídico sugerido por esa lumbrera de Gabriel Jaimes, conocido por todos como el que se desbarataba por defender a Uribe, el día que le dieron libertad, y para premiarlo lo trasladó al departamento de Nariño tal vez con el subterráneo deseo de que renuncie, como en efecto ocurrió, porque tiene dignidad. ¡Y nos lo tenemos que aguantar!
5. El Excelentísimo señor Presidente de la República (entienden el sarcasmo), está retardando el envío de la terna a la Honorable Corte Constitucional para la elección del magistrado que ha de reemplazar al doctor Carlos Beltrán Pulido, a la espera de que sus candidatos sean de la cuerda uribista, como para variar. Lo que duele es que a estas alturas todavía tengamos que aguantarnos que sea el mediocre sub presidente quien se inmiscuya en la integración de esa alta corporación.
6. Como todo no puede ser desastroso viene en nuestra ayuda la denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y ante la Corte Penal Internacional contra Duque, en vista de que la justicia colombiana no actúa, formulada por el senador Iván Cepeda y el referendo propuesto por el senador Roy Barreras para revocar el mandato del subpresidente, por inepto, para el cual se necesita que todo el pueblo colombiano salga a las urnas a votar masivamente para salvar la democracia, si antes un paro nacional no lo ha tumbado. Porque como escribió William Ospina en El Espectador del domingo “todos sabemos que aquí va a pasar algo”, o como dijo en el mismo periódico el columnista Ramiro Bejarano para que “ se acabe este gobierno mafioso, perseguidor y criminal de Uribe-Duque”(las mayúsculas no son mías), pues como lo advierte el doctor De La Calle “Solo el 8% dice que ha mejorado” la situación de seguridad, según Datexto.