* ¿Volverá el estribillo de «hasta donde el pueblo diga yo llego»?
* Populistas y democracia monetizada.
Autoritarismo hasta el fascismo clamó el poder constituyente en 1933 cuando la mayoría absoluta dijo al nazismo «haga lo que tenga que hacer para volver a ser la nación que fuimos antes de la humillación de Versalles donde perdimos la dignidad» y fue sembrada la cepa del virus del holocausto cometido con la segunda guerra mundial.
Imagine hoy al insaciable imparable Trump que despidió del puesto a Kamala y los demócratas en campaña días antes de las elecciones de su aplastante unción como salvador, monarca impune e inmune, si decide invocar al constituyente gringo para que lo proclame rey vitalicio absoluto dueño de la corporación erario estadounidense con la promesa de incrementar el ingreso de dólares a sus bolsillos como en cualquier pirámide bananera. Hoy nada le será negado como en la realidad Colombia 2006 al salvador de entonces.
El tiburón de las ganancias en dólares y bitcoins aliado con otro animal más grande, el interplanetario Musk, trillonario número uno en el escalafón terrenal, desbocaron los instintos primarios y fantasías en monedas de todos los soñadores con los chorros de dinero que ostentan los ganadores de todo en la tierra prometida, nirvana del capitalismo sin límites ni consecuencias ecosociales. Consumo y depredación incontenible es la promesa a cambio de su fanatismo y obediencia con todas las restricciones de libertades que sea necesario suprimir.
Una lección de tantas a examinar es la naturaleza y condición primaria del constituyente en una democracia permeable por ignorancia y proclividad al engaño, manipulación, fanatismo, miedo y odio. Todos los anteriores factores fueron activados desde el mayor dolor y vulnerabilidad de cualquier dreamer emergente migrante en EstadosUnidos, su bolsillo, el lugar de su dignidad y razón.
Que un criminal, convicto y fanático negacionista, megalómano, les prometa leche y miel, tierra y cielo en esta y todas las vidas, en Marte con el arca del irracional Musk, todo eso vale como sea necesario, al precio que fuere, en esa mentalidad. Los Stephen Candi y los televidentes de la doctora Polo, televisión basura, sólo entienden ésa lógica. Por el dólar lo que fuere. Arquetipo de los electores que le dieron todo al absoluto. Cien millones de electores en Estados Unidos no votaron, no eligieron y son treinta millones más que los electores del reelegido.
La bondad del autócrata ungido no se conoce dónde está ni cómo la ejerce, pero no es ni en los negocios ni mucho menos en lo político, ni con las mujeres. Quien quiera seguir su dogma de fe es dueño de su realidad y consecuencias. La lealtad de Trump es con su codicia y está debidamente documentada su manía de dar la espalda a quienes se sacrificaron por él.
El tema aquí es el constituyente primario y su comportamiento en masa manipulable. Colombia 2016 referendo por la paz. NO. Negado. El actual mandatario del cambio ha venido cañando con el poder constituyente y este le ha demostrado desde territorio gringo cómo funciona. Setenta y cinco millones de 244, ése constituyente por acción y omisión, con dolor pasional defenestró a los de la democracia social en el gobierno por dañarles el bolsillo, su más neurálgico umbral de dolor. Suficientes antecedentes para saber el primer empleado colombiano que el desencanto del constituyente lo puede arrasar. No alcanzarán los que salen a sus concentraciones para contener el relato instalado en la masa mayoría.
Necesario recordarle al megalómano inquilino del poder con el sol a las espaldas y saldo en rojo, que el golpe electoral de 2022 no fue a favor de su nombre, fue en rechazo y contra la gavilla de la vieja política mañosa concertada y coludida detrás de una secuencia de nombres y candidaturas impresentables y peores que lo postulado como alternativa.
El constituyente donde sea aplica la moral que necesita y elige lo que merece mientras vuelve a barajar. En 2026 va a mirar quién da más y por medio estará una fuerza que buscará defenestrar a todos los repetidos como los que se unan con el animal político pereirano y su espectáculo mañoso de sainete liberal grotesco.
Visto el triste espectáculo gringo, el as del poder constituyente no aplica para los políticos en crisis de favorabilidad y con el establecimiento a toda máquina en contra. Ése cuento es inservible.
Escrito por Hernando Ayala M. Ciudadano colombiano con libre pensamiento y expresión. Trabajo constante por la gobernanza ciudadana del derecho a la Información.