Cuando ustedes estén leyendo este relato, estará en marcha el acto multitudinario, multicolor, multiétnico y pluricultural de posesión del primer Presidente y Vice presidenta de las izquierdas, sectores alternativos, demócratas, venidos de todos los movimientos sociales y políticos, comunidades negras e indígenas, comunistas, polistas, verdes, muchísimos liberales progresistas: Se posesionarán Gustavo Petro y Francia Márquez. Para que este resultado se produjera, no sólo ha corrido mucha agua debajo de los puentes, se ha derramado muchísima sangre de las entrañas populares, por lo que esto no es fruto de una chepa ni cosas del destino; no señores (as), esto se ha tejido durante décadas, y muchísimos (as) compañeros (as) pagaron incluso, con su vida. Por eso este relato en Tercera Persona.
A mediados de 1974, Iriam ingresó a la JUCO, junto con otros 6 o 7 jóvenes más, siendo los pioneros de esta organización política juvenil en la Virginia, Risaralda. Rápidamente los temores y las dudas por el comunismo, desaparecieron, y entendió que quienes decían que el comunismo es malo, que le quitaba los niños a sus padres, que esclavizaban a la gente, realmente, estaban protegiendo sus intereses de clase. Los hermanos Cardona Restrepo, docentes, venidos del Quindío, fueron los maestros de este grupo. A marchas forzadas, los fines de semana y en vacaciones, estudiaron filosofía o materialismo dialéctico e histórico, economía política, todo, en torno a las condiciones de existencia del pueblo. La primera prueba, fue la confrontación en la clase de Filosofía con el padre Pulgarín, quien en realidad dictaba religión basado en la cartilla del Padre Astete; sólo resistió dos meses, al cabo de los cuales renunció a la clase, luego de unos debates muy álgidos en clase con él. Después vendría la lucha por la conformación del Consejo Estudiantil en el Colegio Bernardo Arias Trujillo, enfrentando la oposición férrea de las directivas dominadas por el Partido Conservador, al final se impuso la organización gremial estudiantil, y rápidamente se extendió a los demás colegios del municipio, a la par que crecía la JUCO de manera extraordinaria.
Esta organización tuvo seguidamente, experiencias definitivas como las siguientes: Apoyó la conformación del Sindicato de la Industria de la madera (Clavijo y ABC), así como los sindicatos en el Ingenio Risaralda (Sintrairisa y Sintraicañazul), fortaleció la Asociación de Areneros y ayudó a conformar el Centro No. 1 de la Central Nacional Provivienda “CENAPROV”, fundándose años después del barrio Pedro Pablo Bello.
Tanto se avanzó en el movimiento con las comunidades y el pueblo, que, en 1978, se logró elegir el primer concejal de izquierda en la Virginia, a nombre de la Unión Nacional de Oposición UNO, curul que se repetiría en 1982 y años siguientes. Tuve el honor de ser ese concejal.
La JUCO se convirtió en una organización numerosa e influyente en el municipio, pues llegó a tener 150 militantes aproximadamente, superado sólo por Pereira, teniendo una destacadísima actuación en el Paro Cívico Nal. de 1977, y en los paros cívicos locales de ese mismo año y particularmente, en el de 1982, movimiento que fue brutalmente reprimido por la Policía Nacional, ya que hirieron a bala al menos 17 manifestante (que la Policía ha sido utilizada como fuerza de choque letal contra la población civil no es de ahora, como lo puedo testimoniar aquí).
Iriam estuvo en lugares de avanzada en estas luchas, y luego incorporó a su repertorio político las orientaciones del Partido Comunista, la lucha por la Apertura Democrática, los derechos humanos y la paz. Se recuerda mucho a Santiago Londoño, miembro del Comité Mundial por la Paz. ¿Los comunistas luchando por la Paz? Sí señores, también por la salida política y negociada del conflicto social y armado.
¿Por qué este recorrido de la mano de Iriam, omitiéndose claro está, muchísimos detalles? Porque este domingo 7 de agosto de 2022, se posesiona el primer gobierno de izquierda, multicolor y pluralista, como se dijo al iniciar este breve relato, que ha despertado serias esperanzas de consolidar un país en democracia, donde prevalezca la vida, la paz, la cultura, el territorio, el agua, las selvas, la fauna, en una palabra: Los derechos de la gente y de la naturaleza.
Así rendimos homenaje a quienes ofrendaron hasta la vida por ver este nuevo amanecer, aunque tengamos que dormir con un ojo abierto. Homenaje a Gildardo Castaño Orozco, y con él, todos nuestros dirigentes y compañeros asesinados en Risaralda; a Pardo Leal y a Bernardo Jaramillo, y en general, a las más de 6 mil víctimas caídas en el genocidio cometido contra la Unión Patriótica.
[i] Rindo homenaje a Iriam Suaza, haciendo uso de su nombre. Oriundo de la Virginia, Risaralda, militante de la Juventud Comunista JUCO, una de las víctimas de la masacre cometida contra esta organización política juvenil, el 24 de noviembre de 1987, en la cual claramente estuvo la mano siniestra y criminal de la Cuarta Brigada del Ejército, con sede en Medellín. Otro crimen de Estado que permanece en la impunidad.
Paz en la tumba del COMPAÑERO CAMARADA Y AMIGO a quien tuve el honor de visitar en varias ocasiones en su lugar de trabajo en Medellín en los días del asiago tiempo que Fernando mensoona en su conmovedor artículo ,y me digno de haber Sido uno de esos muchachos que más eufóricamente que política pusimos un granito de arena de lo que hoy podemos celebrar como el avance más grande hasta la fecha de las luchas populares en nuestra COLOMBIA que por fin podemos decir está siendo NUESTRA..PD. Gracias y de nuevo Fernando felicitaciones por tus artículos me traen además de nostalgias mucho ejemplo …, Fabio Arce..