POR JUAN GUILLERMO ÁNGEL
Los Estados Unidos eligirán presidente en medio de una polarización extrema, dicen los analistas que nunca en la historia reciente se ha dado un ambiente tan hostil, las familias se dividen, las amistades de siempre desaparecen en medio del fragor del combate político, las tesis extremas conducen a posiciones extremas, hoy el 40% del electorado norteamericano piensa que la contraparte es malvada, así ese fenómeno que creíamos era exclusivo nuestro, ahora resulta que es algo que compartimos con otras latitudes.
El pais que eligió al señor Trump estaba dividido: el nacionalismo, el desempleo, la reducción en los ingresos entre otros temas favorecieron al aspirante Republicano quien ofrecía una América para los Americanos, una limitación a la inmigración, un favorecimiento a la industria nacional.
Para buscar su reeleción el presidente muestra:recortes de impuestos, nombramiento de jueces conservadores, el crecimiento, antes de la pandemia, del sector más pobre de un 4,7% anual, confianza de las pequeñas empresas como no se veía en décadas, un fuerte crecimiento del PIB, haber golpeado al estado islámico y negociado La Paz con otros paises y le ha mostrado los dientes a China.
La pandemia está pesando mucho dada la estela de muerte ha dejado en mala posción al gobierno, The Economist acusa a Trump de “haber profanado los valores que hacen de los Estados Uidos un faro para el mundo”, menciona temas como el haber pisoteado principios fundamentales para la cultura anglo sajona como la verdad, el haber discriminado violentamente a sus opositores , el haber desconocido la peligrosidad de la pandemia, el haber fracasado en ofrecer y conquistar unanimidades frente a riesgos de carácter nacional, el haber fracturado al país frente a asuntos tan delicados como el medio ambiente, el haber utilizado el sistema judicial para perseguir adversarios, el hacer uso del presupuesto nacional para atender amigos, la crueldad con los inmigrates, haber hecho del partidismo su bandera, todo ello sumado hace que sus críticos consideren que Trump es el peor presidente en años.
De otro lado afirman que no esperan de Biden un mesías redentor, su perfil no es el de un líder del carisma de Obama, y su figura parece frágil por su edad y por los achaque de salud que se le atribuyen, pero a pesar de ello y del discurso que le asigna tendencias socialistas en una país donde es el paradigma lo contrario, el nombre del candidato demócrata les despierta la esperanza de que recuparará lo que el gobierno que termina destruyó.
Esta campaña del imperio está llena de baches, golpes bajos y pasiones, a tal punto está hirviendo el caldero que el mundo entero participa desde la distancia temeroso de lo que viene y particularmente nuestro pais es protagonista pues ya hace parte del discurso de campaña de los unos y de los otros; lo único cierto es que seremos víctimas dado que nada tenemos para ganar.
Si por allá llueve por aquí no escampa, aquí también un presidente le dio un golpe mortal al pilar de la democracia, a la voluntad del elector primario sobre el cual se cimenta el estado derecho, aquí también sedesaprovechó algo tan anhelado como La Paz para lograr la unidad de la nación entera, aquí también la mentira se convirtió en instrumento para gobernar, de la misma manera el presupuesto apalancó decisiones y atendió amistades, aquí también se adquirieron compromisos más allá de nuestra capacidad de pago, adicionalmente la justicia se convirtió en parte activa, y para completar las similitudes, los partidarios de uno y otro bando justifican lo injustificable, casi siempre argumentando que el otro también incurrió en las mismas o peores faltas, como si el delito del uno validara el delito del otro, así la mitad de nosotros pensamos que la otra mitad es malvada, y todo ello es presagio de que lo peor está por venir.
La gran diferencia es que las instituciones y fuerte economía de los Estados Unidos aguanta hasta huracanes y aquí cualquier aguacerito nos inunda.
Tal cual !!!