Las Tablas de la Ley de Petro.

ESCAMPAVIA-

         Petro, en campaña, aparece rodeado por sus coroneles mostrando un símil de las tablas de la ley para prometer que: I.- NO EXPROPIARÉ II.- NO CONVOCARÉ A UNA ASAMBLEA CONSTITUYENTE, III.- MANEJARÉ LOS RECURSOS PÚBLICOS COMO RECURSOS SAGRADOS, IV.- IMPULSARÉ LA INICIATIVA PRIVADA , EL EMPRENDIMIENTO Y LA FORMALIZACIÓN, V.-GARANTIZARÉ LA DEMOCRACIA PLULARISTA Y EL RESPETO A LA DIVERSIDAD, VI.- RESPETARÉ EL ESTADDO SOCIAL DE DERECHO, VII.- RESPETARÉ EL ACUERDO DE PAZ, VIII.- NOMBRARÉ A LOS MAS CAPACES, IX GARANTIZARÉ LA IGUALDAD DE GÉNERO, IMPULSARE EL TRÁNSITO ORDENADO A LAS ENERGIAS LIMPIAS, XI.- IMPULSARÉ LA EDUCACIÓN PÚBLICA GRATUITA Y DE CALIDAD PARA TODOS LOS COLOMBIANOS, XII.- GRARANTIZARÉ EL CUMPLIMIENTO DE LOS RESULTADOS DE LA CONSULTA CONTRA LA CORRUPCIÓN.

         No es una novedad que los presidentes engañen, Santos escribió en mármol que no haría reformas tributarias, y nos entregó 4 y la peor, la trampa a la democracia, cuando desconoció las elecciones que había jurado respetar.  

Los doscientos años de vida republicana, los cuales, para este presidente, solo ha sido un desfile de ladrones y bandidos, se cambiaría de la mano del nuevo mesías, portador de todas las virtudes y dueño de la varita mágica que le permitiría a Colombia vivir sabroso, pero ha sucedido lo contrario, de esas promesas no ha quedado ni el pegote.

Veamos: las expropiaciones se están haciendo por la puerta de atrás; hay campaña para una nueva constituyente,  de la pulcritud hablan los multimillonarios contratos con Euclides Torres, o los carrotanques, o el sainete de los pasaportes, o la destrucción de ECOPETROL, o el arriendo por una semana de 50 metros cuadrados por cuatro mil millones de pesos , o lo que  nos cuestan los cortesanos y los estrategas foráneos; del impulso a la iniciativa privada solo quedan los agravios a los empresarios; al estado de derecho le hace gambetas; del acuerdo de paz hablan las protestas de la guerrilla; del gobierno de los más capaces solo se dio parcialmente con su primer gabinete: embajadores, ministros y cargos de responsabilidad y mando solo se encargan a activistas sin experiencia, academia o antecedentes de servicio público, fe de lo dicho lo dan las familias de Roy Barreras, o la de  Guanumen, o los parientes de los poderosos, todos ellos viviendo sabroso de cuenta de los contratos de asesorías y otras menudencias que sin límite reciben hasta de las mismas entidades que regentan sus benefactores.

Pedirle a Petro que no mienta es ladrarle a la luna, lo que hecho con fervor es viajar por el mundo, incumplir a compromisos, acolitar a Maduro y a los gobiernos de sus afectos; en vez gobernar continúa en campaña electoral, agrediendo, lo cual es su especialidad.

Del Petro convocando a acuerdos nacionales para lograr el cambio que Colombia necesita, al agresivo orador de plaza pública, solo queda la esperanza frustrada de un gobierno para todos, esa vuelta canela aparece  quizás por el desespero por la pérdida de apoyos  y el naufragio de las mal formuladas reformas, el cambio es notorio: acusa a la Constitución que ayudó a redactar, a la prensa, al congreso, a los partidos, a FECODE, la que aportó a su campaña y apoya las reformas a la salud y a las pensiones para el resto de los mortales menos para ellos; acaba con ECOPETROL y de paso a su sindicato, y agrede a Raymundo y todo el mundo con verdades a medias y mentiras al por mayor.

La meta de apoderarse de todo: de la salud, de la justicia, de la educación, de las pensiones, del ejército y de la policía y de paso crecer la burocracia, son pasos previos para convertirse en un dictador vitalicio, ¿no es así señores cubanos, nicaragüenses, venezolanos, rusos, coreanos y compañía ilimitada?