Cumpliendo su vital apostolado, se retira de la dirección de la Diócesis de Pereira el obispo Rigoberto Corredor Bermúdez, una persona de gran formación intelectual, bondadoso, cercano a su grey en el cuidado evangélico, además de liderar civismo y desarrollo en la región y quien, nacido en esta capital, ha participado en su crecimiento con equidad y patriotismo.
Su papel desde la presidencia de la Junta de la Sociedad de Mejoras ha sido eficaz en los logros que se han cosechado, llenos de progreso y con apoyo ejecutivo de Ana María Cuartas. Monseñor Rigoberto denota energía y entusiasmo, lo que garantiza su consejo inspirador y permanente por el bienestar común.
Su báculo de pastor pasa a las manos y mente consagradas de Monseñor Nelson Jair Cardona Ramírez, oriundo de Caldas, quién ha servido con devoción inspirada en sitios de la denominada “Colombia profunda”, conocedor de las angustias y de los flagelos de la violencia en todas sus formas, el desamparo, el desarraigo de familias campesinas, que lo ha convertido en voz fustigante contra la maldad de una máquina de guerra usada para amedrentar los derechos humanos.
El obispo Cardona es parte de la cultura que será definitiva en la cualidad ascendente de una comunidad inmensamente cristiana y será un allegado para redimir a los más pobres que claman ayuda y abrigo. Gracias a Monseñor Rigoberto. Bienvenido Monseñor Nelson Jair. Y también un reconocimiento a Monseñor Paolo Rodelli, Nuncio Apostólico del Vaticano en Colombia, quien cada vez que viene al territorio, tal como ahora en el traspaso del manejo diocesal, comparte con el pueblo desde el púlpito de la Catedral, y por su verbo ilustrado en el mensaje bíblico, es largamente aplaudido. Conversar con él es una experiencia que mueve a la admiración, especialmente al comprobarse su conocimiento y afecto por Pereira y Risaralda.
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BERNARDO GIL JARAMILLO. Después de trasegar cargos en condición de empresario, educador, político, investigador, servidor público de alta comprensión, escritor, reivindicador de banderas sociales, no ha dejado de seguir pregonando, con vigor decisión y fuerza intelectual en procura del bien general, de su apego y querencia por Pereira, Risaralda, la región y el país brillando su verbo elocuente con civismo que lo ha hecho acreedor a la admiración, al respecto y al seguimiento de ideales que por su nobleza y desprendimiento, lo ubican en un foro que difunde valores y principios. Su batallar por la constitucionalidad como razón de la democracia en posiciones de elección popular y encargos de representación que ha ocupado, es pasaporte abierto a la ciudadanía que él ha sabido honrar. Gil Jaramillo ha recibido múltiples distinciones que exaltan sus méritos en gracia a su convicción que refleja la sabiduría que ha adquirido en años de acción y constancia. Ostenta las máximas condecoraciones de la Gobernación y la Alcaldía, la mención de Reconocimiento Gremial, las preseas de las instituciones académicas en las cuales ha participado, en la formación de dirigentes y profesionales, destacándose en la iniciación de la Universidad Católica de Pereira; recientemente recibió la medalla “Francisco José Ocampo” otorgada por Fenalco en gratitud a una vida pletórica. La Cámara de Comercio de Pereira le impuso la condecoración “Mérito Cívico 2024”, acto que aplaude la población entera. La creación de la Corporación para el Progreso Social y Económico de Risaralda -COPESA- es verdadera escuela descubridora de jóvenes talentos de varias generaciones que han salido a dirigir posiciones en los sectores público, privado, y entes de elección popular. La publicación y permanencia de la magnífica revista Dimensión Económica que, dado su contenido y lujo editorial, merece elogios y aplausos por ese esfuerzo salido de su vocación incontrastable. Del doctor Bernardo se pueden llenar prolijas cuartillas en su apología, pero baste agregar la credibilidad que se manifiesta en su grandilocuente capacidad de convocación que ostenta de manera seguida. Las asambleas de COPESA así lo confirman.
Nota: Esta columna no aparecerá los días 29 de diciembre, 5 y 12 de enero. ¡Felicidades para todos!