Fundado el 9 de febrero de 2020
LUIS FERNANDO CARDONA
Director Fundador

Actualidad¡Quien lo vive es quien lo goza!

¡Quien lo vive es quien lo goza!

Miscelánea

Muere prematuramente quien se resiste a la moda; bajo esta premisa, y considerando que, en la altura de los años, uno va perdiendo el gusto por lo moderno y ciertas entretenciones, especialmente las que implican grandes aglomeraciones, tomé la decisión de ir al Súperconcierto, por la gentil invitación de la Alcaldía de Pereira, en el cierre de las Fiestas de la Cosecha.

Hablo de actitud de cambio, porque el cartel de artistas, salvo Niche, me era totalmente desconocido, y especialmente la estrella del espectáculo de fondo, Blessd, del que no tenía ni idea. En fin, voy a contarles entonces lo que vi, lo que me gustó y lo que no me gustó.

Lo que me gustó fue casi todo, empezando por la organización, tanto en el ingreso como en la salida, a eso ya de la 1:00 a.m.; estuvo bien la logística, la ubicación de los diferentes segmentos de público y la muy buena actitud de las autoridades, en cabeza de la Policía Nacional. Nota especial para el sonido, con un montaje poderoso, con agudos limpios y unos bajos que estremecían el cuerpo; el juego de luces y los efectos especiales en el video completaron un espectáculo de primer nivel.

Los artistas: De los locales alcancé a ver la Real Banda, a Brigadier y a Junior Vargas; súper comprometidos, le pusieron el alma, calentaron el ambiente y ayudaron a bien morir la tarde, para darle paso a la noche, que se iluminó con la puesta en escena y las notas del despecho de Alzate, artista muy entregado y muy versátil; luego vino Niche, con su grandeza y una muestra de sus temas más populares, entre ellos «Algo que se quede», y, literalmente, ayudaron a que la velada se quedara para siempre en la memoria de quienes estuvimos allí.

A eso de las 11:30 p.m., apareció «El Bendito», así le dicen al fenómeno del momento de la música urbana; yo no sabía que existía y mucho menos qué carajos cantaba; de hecho, un señor, que como yo asistía a la zona familiar acompañando a sus hijos, me retó y me dijo que me daba 100 mil pesos si le mencionaba una sola canción de Blessd, y, por supuesto, esa platica se perdió. Pero el que estaba joche era yo, porque los muchachos que asistieron a ver al paisa, en su mayoría ubicados en oriental, se sabían todo y cantaban como poseídos las letras de canciones marcadas por el grueso calibre, la sensualidad sin filtros y esa extraña forma de romanticismo que tienen los chicos de hoy.

No sé si vuelva a un concierto de Blessd, pero debo decir que «El Bendito» le cumplió a Pereira, llevó al frenesí a sus seguidores y hasta se emocionó él mismo, al borde del llanto, al ver un público tan compenetrado, propiciando así la forma más apoteósica de cerrar las mejores fiestas de Pereira en mucho tiempo.

Adenda. Muy bueno que el alcalde anunciara que las utilidades de las ventas en el Super Concierto se destinarían a causas benéficas, pero, muy malo, que la oferta de alimentos y bebidas resultara tan limitada, por lo menos en la zona que me tocó, con claro abuso de los precios, pues no hay derecho que en un evento al que asistían personas y familias enteras, desde tempranas horas, por una botella de agua personal cobraran 10 mil pesos. Con precios más razonables y más variedad, no solo guaro, quizás los recursos para la beneficencia hubieran sido mayores.

James Cifuentes Maldonado

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Más articulos