Recordando un Abril de la historia de Santa Rosa de Cabal 

 El mes de Abril desde su primer día, es importante para la historia de Santa Rosa de Cabal pues en ese mes de 1936 , apoyado por Manizales y el oriente de Caldas, logró que la Asamblea de Caldas negara la propuesta de Pereira apoyada por el Quindio y algunos pueblos del occidente, de anexar el territorio de Dosquebradas , la Estrella, El Manzanillo y un lote del Corregimiento de El Español, a Pereira . Significaba arrebatarle 12.518 hectáreas, 10. 914 habitantes, 200.000 arrobas de café y 8.000 cabezas de ganado; es decir, entre 25 y 30 por ciento del presupuesto y un territorio que fue suyo desde que Fermín López y su gente lo fundó. De hecho José Hurtado , su cuñado, hizo su primer abierto en este territorio al lado del Otún y fue esa la tierra que recibió en 1849 . El 12 de Abril de 1936 se conformó la Junta Pro defensa de Dosquebradas conformada por los señores Antonio Ardila, Jaime Llano Escobar, Benjamin Villegas y Arturo Serna Gómez . Hubo debates fuertes en la Asamblea y entonces Carlos Llanos en la plaza de Bolívar dijo a los santarrosanos : » Santa Rosa debe resurgir por patriotismo , por espíritu público en todas las esferas» y así fue . En su libro Disertaciones , capítulo 16 – inédito- José Ramón Velásquez registraba : » En ningún momento como en éste, nuestra ciudad había vibrado tan armoniosamente, ya que ella pulsó las fibras del sentimiento colectivo y vio cómo sus hijos, en pie, como un solo hombre, escribían delirantes una de las páginas más brillantes de su historia» Esta junta fue respaldada por los ciudadanos que como lo manifiesta Velásquez , sentían la urgencia , el dolor de patria : » la ciudad vive momentos memorables, herida en pleno corazón, hace un llamamiento fervoroso de contienda a sus hijos y nuestro pueblo … timorato, respetuoso y pacifista por instinto, siente a estas horas el aletazo de la traición y la perfidia y erguido y valiente se apresta a la defensa de su patria » . Y se manifestaron y no sólo hombres; las mujeres salieron a la calle. Escribía al respecto José Ramón » y lo más bello de este brote de amor cívico , lo que más llena el alma de una consoladora esperanza y el corazón de coraje, es que en este movimiento santarrosano, nuestras damas, lo más preciado de nuestra sociedad y aún las mujeres humildes de nuestro pueblo, se arrojaron a las calles en imponente manifestación » Y José Ramón Velásquez que era la voz del pueblo, escribió entonces una plegaria a la bandera de Santa Rosa de Cabal » Bandera santarrosana que con orgullo llevo sobre mi corazón . Bandera santa, tú que simbolizas todo cuanto de grande, de sublime y de noble hay en los pebeteros sagrados , tú que eres paz, eres fe y eres trabajo, recoge esta oración de nuestras damas y arrúllala en la cuna de tus sedas , para que ella tenga un hondo sentido maternal ; vigila nuestros lindes sagrados y levanta sobre ellos la sonora sonrisa de tus pliegues consagraticios como un grito triunfal , que difunda a los vientos de Caldas, el nombre augusto de Santa Rosa como un himno de victoria»