Que el mundo anda loco ya se sabe, y que una escena de celos, un amor roto, o un escándalo de alcoba, causan en nuestro país más revuelo que una reforma política, a la seguridad social o una pensional, lo sabemos también. Ésta es la época de los medios de comunicación masivos puestos al servicio de los famosos de una manera escandalosa y abusiva, estas celebridades deportivas, estrellas de cine, políticos (Clinton y su babeante Mónica Lewinsky), cantantes, o autoproclamadas divas, con cuyos escándalos cautivan a fans y seguidores, que con arrobo sensorial y avidez desmesurada disfrutan sus dramas. Pero este mundo del chisme y la exposición de dolores y rencores a la luz pública, tiene algo positivo: comprobar que nuestros ídolos tienen pies de barro.
Para ubicar a los jóvenes lectores como mis nietos, debo contar que desde siempre los ídolos musicales colombianos fueron extranjeros: Peronet e Irurieta, Valencia y Aguayo, Olimpo Cárdenas etc. nuestros padres y abuelos oyeron a los Trovadores de Cuyo, conjunto América, boleros con tríos famosos como ”Los Panchos”, tangos y Milongas de cantantes argentinos con voces hermosas como la de Oscar la Roca, y el inolvidable Carlos Gardel, sin olvidar a cantantes de rancheras como Miguel Aceves Mejía, Luis y Antonio Aguilar, Pedro Infante y posteriormente José Alfredo Jiménez, para nombrar los más conocidos, y a riesgo de omitir a muchos famosos.
En cuanto a los músicos de mi juventud: Palito Ortega, Sandro, y Leonardo Fabio eran argentinos, Leo Dan chileno y Luisito Rey mejicano, esos eran los que creaban las melodías que dedicábamos a nuestras primeras novias para enamorarlas, también conocimos cantantes famosos como el francés Ádamo, los italianos Nicola di Bari, Gigliola Cinquetti y el español Rafael entre los más destacados.
Cantantes de la época de mis abuelos o padres hicieron películas, no siempre con muy altos estándares artísticos, entre ellos Pedro Infante y Gardel; igualmente algunos cantantes de mi juventud hicieron filmaciones, recuerdo ir con alguna de mis primeras novias a ver una película de Leonardo Fabio donde cantó “Vieja Calesita” de manera emotiva y magistral, eso sí no me pregunten el argumento porque esa vez (y todas las anteriores y posteriores), abrazando a mi novia y chupándole encía, ni sabía que pasaba, todo eso desobedeciendo el consejo de mamá y suegra “vayan a ver cine, no a dar cine”, cuando salíamos del Teatro Caldas, en la 18 con octava, y yo estaba platudo podía invitar a mi noviecita a un jugo de lulo con un perro caliente en la cafetería “El Confite”, lo máximo de una invitación de un estudiante pelagatos, y si la cosa estaba pesada le daba uno a su “evita” un vasito de heladino, con su respectiva cucharita plana de madera para consumirlo. En una película inolvidable, Rafael cantó “Cuando tú no estás” de una manera tan sentimental y maravillosa, que mi novia de ese tiempo y yo prometimos no separarnos nunca, promesa olvidada e incumplida.
No soy seguidor de Shakira, ni de Juanes, no sé qué canta Fonseca, escasamente he oído cantar a Cepeda en la Voz Kid, pero me alegra que ahora nuestros artistas nacionales brillan en el mundo, y son las luminarias de la música latinoamericana, disputando y ganando Gramys; cuando vetaron la “Camisa Negra” de Juanes en Italia, me alegré porque así recibiría más publicidad, y en el caso de las tres canciones de despecho de nuestra afamada cantante, imitando el lenguaje de algunos jóvenes, me parece que se boletió, porque parece que esa traición le causó mucho dolor, pero me alegra que ella utilice su tragedia para batir sus propios records de reproducciones en plataformas musicales. De hecho siempre enseñe a mis estudiantes que las personas triunfadores transformaban sus tragedias en obras de arte universal: Tolstoi con su desastrosa vida marital, Alexander Solzhenitsyn con su Archipiélago Gulag, y Mandela presidente de Suráfrica luego de 27 años de cárcel, mientras que los mediocres terminaban convirtiéndose en fracasados o drogadictos. Respecto a si su corito de “uuuu” puede ser plagio, no lo creo; la originalidad de la letra tampoco es deslumbrante, de hecho hay una vieja canción que dice: “Que mala pata, que mala pata/ cambiaste zapatos por alpargatas/ lo que te espera, lo que te espera/ cambiaste una cama por una estera”, y hablando del cambio de pareja de Piqué, el disco mencionado dice “lo que te espera, lo que te espera/ cambiar un artista por un cualquiera”, frase que evidentemente Shaquira hubiera podido decir.
Para fortuna de nuestra cantante, famosa además por su sensual movimiento de caderas, según sus propias palabras “las mujeres no lloran, las mujeres facturan”, cosa que no pudieron hacer ni nuestras madres y abuelas, quienes ante las infidelidades maritales debían tragarse sus lágrimas y orgullo por depender económicamente de su esposo, quien no pocas veces, además de pasarle otras por la cara podía pasar de la violencia sicológica a la física, sin que ellas pudieran hacer algo distinto a callar las afrentas, y mantener ignorantes a padres y hermanos de esas humillaciones.
Piqué fue noticia en días pasados porque según algunos comentaristas deportivos, con un grupo de amigos habían decidido revolucionar el futbol y adaptarlo a las capacidades de prestar atención de las nuevas generaciones y realizar un campeonato con “novedosas” reformas, comentaristas que en mi concepto están pasando der críticos a lambones del mencionado ex-futbolista, dándole más ínfulas de las que realmente se merece. Sí desfigurar un deporte cambiando sus reglas es un acto de” genialidad”, ahí van algunas propuestas ridículas a nombre de innovación:
-Que los partidos de futbol se jueguen en cuatro tiempos, todos con descanso de 10 minutos; que si el árbitro lo considera pertinente, jugados 2 tiempos, suspenda el partido para otro día, especialmente si es campeonato de futbol veredal y los equipos están enguayabados; que un jugador pueda coger el balón con las manos y cruzar la cancha con él, si lo patea y entra a la portería es gol. Que la arquería se disminuya a la mitad del tamaño, y los penaltis los tape el arquero con los ojos vendados.
-Que en baloncesto las cestas de cabeza valgan 4 puntos, y si son hechas pateando el balón valgan 6; que el equipo pueda cambiar todos sus jugadores al finalizar cada tiempo, así jugarían más velozmente y los grandes equipos contratarían más jugadores.
-Que en balón mano acuático no se pueda quedar nadie de portero, y que cuando un jugador se vaya de cancha a cancha sumergido, y anote gol, se decrete muerte súbita para el equipo que recibió el gol.
Como puede verse, las estupideces pueden continuar hasta el infinito, lo que no necesariamente me convierte en un genio.
En medio de este maremágnum, Petro obnubilado por su etérea paz total, chambonea y le da excusas al mañoso E.L.N. para volverle a mamar gallo a las negociaciones. El gobierno aparece descoordinado, confuso, enredado, situación que empresarios, bandidos y gran prensa utiliza para desprestigiar sus buenas intenciones, y el pobre Petro, sin una” Vicky Dávila” que le haga propaganda y lo deje auto- entrevistarse por horas ¡no hay derecho ¡Humildemente y por unos pocos dólares mensuales me auto-postulo para un nuevo cargo en el gobierno: Vocero oficial, ¡tengo lista la hoja de vida!
En este despelote, solo falta: Que los clubes de Twingo del país ( ojo Rodolfo Sánchez), decidan bloquear las carreteras hasta que Shaquira pida excusa por sus redes sociales, y si ella no lo hace, digan que quemarán todos los Mercedes que encuentren en carretera.
Que el Centro Democrático presente para la reforma a la Justicia, un proyecto de ley pidiendo cadena perpetua para casados infieles, que no tendrán derecho a la J.E.P. Y declaren que, como en su versión de la historia de Colombia no existió paramilitarismo, todos los profesores de Sociales que insistan en “adoctrinar” niños con esas mentiras sean fusilados por corromper a la juventud colombiana.
El pasado fin de semana me mandaron un meme que resume el lio Shakira – Piqué: una perrita mirando a un perro tener sexo, a la perrita mirona le escribieron “Shakira cantando”, al perrito follador “Piqué”, a eso se reduce la historia, ella cantando y ganando dinero y él entretenido con su nueva pareja; estamos en la época en que la fama y una buena imagen pública se buscan a cualquier costo, así sea vendiendo queratinas y vandalizando Transmilenio.
Para no continuar con desatinos, me parece pertinente repetir un refrán de Epifanio Mejía, que mi mamá citaba con frecuencia: “Todos estamos locos grita la loca. Qué verdad tan amarga vierte su boca”.
Apreciado Carlos Ariel, a todos nos quieren amaestrar siguiendo el mismo patrón, no siempre lo logran, no hay que sufrir por ser diferente, ahí está la gracia. Mil saludos y abrazos
Don Néstor, sus palabras me dan ánimos para seguir en esta labor, mil bendiciones
Muchas gracias Don José Danilo por compartir sus publicaciones. Dios lo bendiga.
Siempre me auto_flagelaba pensando que el loco y desadaptado social era yo, pero para mí alegría, son locos muchos y muchos los locos son.