Por: Julián Muñoz Lenis
Esta es el nombre de la campaña con la cual el gremio deportivo de Risaralda pide a gritos su reactivación. Y no es para menos, ya completan más de cinco meses con los escenarios cerrados, sus deportistas confinados, restringidos y sin muchas posibilidades de que su actividad retorne a la normalidad.
El deporte, considerado el mejor vehículo para mejorar la salud física y mental, y más en una emergencia como la actual pandemia, hoy no es valorado como debe ser. La difícil situación del gremio ha llegado a tal punto de llegar a la clandestinidad, ¡insólito!
La situación afecta a padres de familia, deportistas, dirigentes, entrenadores, árbitros y monitores, que ante la grave crisis han optado, en algunos casos, por buscar otras alternativas para su subsistencia económica.
Los deportistas no solo han tenido que cambiar sus planes de entrenamiento, también sus proyectos de vida. Además de esperar, aguantar y entrenar bajo cuatro paredes de manera virtual, algo impensado cinco meses atrás.
El gremio del deporte en Risaralda pide una reactivación urgente, eso sí, cumpliendo con todos los protocolos de bioseguridad. Hay unidad, compromiso, responsabilidad y una gran necesidad de por medio: la salud mental y física.
¿Qué más hay que esperar para su reactivación?
¡Sí a la reapertura de espacios deportivos!
Twitter: @lenisjulian
