OJO CON EL CINE
Ya va llegando la hora de darle a Pereira una vez más (del 18 al 21 de agosto próximos), nuestro regalo de cada año: Una nueva experiencia de conversaciones sobre cine con altura; una posibilidad de ver cintas en todos los formatos y metrajes posibles; una nueva presentación y lanzamiento de publicaciones sobre el Arte del Siglo XX; una nueva dosis de promoción de otros Festivales de Cine de los que se hacen en nuestro país; un nuevo Concurso de Cortometrajes del Eje Cafetero (el 12); el sentido y sincero Homenaje a un Cineasta local y a uno o una de carácter nacional y una sumatoria de muy interesantes, inteligentes y amenas charlas sobre el Eje temático propuesto en la versión anterior que este año se determinó fuera Teatro vs. Cine y algunas otras cositas más, en el marco de las Fiestas Aniversarias de nuestra querida Querendona y Trasnochadora Perla del Otún.
Y los nervios empiezan a hacernos palpitar de una manera distinta el corazón a todo el equipo que le ponemos el alma a tan encantador acontecimiento.
Si el apoyo de los entes que manejan la cultura en nuestro medio hubiera sido en esta oportunidad como lo soñamos siempre, no sobra decirlo, nuestros corazones palpitarían tranquilamente, pero no fue así, aunque gracias a la solidaridad de todos los que conformamos este equipo de trabajo y del coraje de algunos que nos contagia de valor para acometer tareas tan nobles como lo es la de darle a nuestra ciudad cosas bellas, cada vez, nos hemos propuesto darle a la ciudad una muy buena, bella y grata sorpresa, llena de novedades, magia y encanto.
Y vamos por partes:
Invitadas de lujo, la directora de cine Yanara Guayasamin, la hija del famoso pintor ecuatoriano Oswaldo (según algunos críticos de arte de talla mundial, el Mejor Artista que ha dado Latinoamérica), quien traerá algunas de sus más recientes logros cinematográficos y nos hablará de su cine; la actriz, poeta, dramaturga y cineasta venezolana Yoyiana Ahumada quien nos compartirá una mirada muy adulta y seria sobre su percepción de lo teatral enfrentado a lo cinematográfico, toda vez que ha trabajado con mucha madurez esas dos ramas del arte y la joven Salomé Castro, santandereana que se formó valerosamente en la Escuela Superior de Cine y Audiovisuales de Cataluña (España) y diplomó en la Riverwood Internacional Charter School, Atlanta, Georgia, con una tenaz especialización en EDICIÓN CINEMATOGRÁFICA y que nos mostrará en exclusiva dos cortometrajes en los que sus manos han hecho la difícil tarea de cortar, eliminar y pegar en una sola cinta, las imágenes que serán en definitiva las que de manera perfecta, narrarán la historia que veremos en ellas: “Fifteen Love” y “Cova”.
Y es a ella, a la joven Salomé Castro Duque, a quien este año, el Encuentro Nacional de Críticos y Periodistas de Cine, le rendirá el Homenaje como Cineasta Nacional.
NOTAS SOBRE EL CORTOMETRAJE INVITADO
“FIFTEEN LOVE”
En lo que nosotros llamamos 15-0 o quince-nada, el árbitro dice: Fifteen love. ¿A qué se debe? Hay dos teorías al respecto, que bien pudieran ser ciertas ambas, pues cada país las habría podido adaptar a sus costumbres.
En inglés, cuando alguien no tiene nada para dar, sólo tiene amor. De ahí la palabra love (amor, en inglés). En Francia, al cero se lo llamaba huevo (l’ouef) que suena fonéticamente igual que love.
Sinopsis:
“Fifteen Love» – Alexandra ha jugado al tenis desde que tiene memoria. Tras años entrenando bajo la tutela de su padre Julio, un tenista retirado que pretende revivir sus victorias a través de ella, se ha convertido en una de las tenistas junior más prometedoras del circuito español. Durante la celebración de uno de los torneos más importantes de la temporada de 1978, la presión creciente que ejercerá su padre dentro y fuera de la pista empezará a afectar su salud mental. Con la llegada de la adolescencia y los interrogantes que esta conlleva, Alex se dará cuenta de que, quizás, este no es su destino.
Una película corta muy bien elaborada, contada y puesta en escena. Ambientada de manera perfecta, adaptada a la época que se dice, sucede, con una actuación impecable de Víctor Solé, el padre y de la bella Inés Coca (Alexandra), que contagian al espectador dos temperamentos fuertes que nos hacen coger, de una parte, amor y simpatía por ella, su hija la afiebrada al Tenis y de otra, pereza y rabia por él, su padre, quien, por su amargura y sequedad, nos obliga a mirarlo con desdén y rabia.

Ojalá las cosas, todas, nos salgan bien, como las soñamos.
En una próxima oportunidad les contaremos sobre otras sorpresas.
Felicitaciones a Germán y al equipo que organiza con tanta pasión y empeño este evento, que enaltece a Pereira en el panorama nacional por su sello tan particular: encuentro de críticos y periodistas de cine. Muchos éxitos y gracias de los aficionados al cine.
“La perseverancia alcanza lo que la dicha no”
Te deseo lo mejor de lo más bueno en este 24 encuentro nacional de críticos y periodistas de cine. Ya veremos cómo hacemos presencia!
Felicitaciones por tu quijotesco esfuerzo de cada año y durante ya décadas. Seguro que tu proyecto será un éxito. Excelente columna.