CONTRACRITICA Con Humor, Amor y…. Ardor
En una ciudad, como la nuestra, en donde algunos servidores públicos, como los que mandan, por ejemplo, tratan a la ciudadanía a las patadas; en donde el centro principal de discusiones ciudadanas es conocido como el “Honorable Establo”; en donde las grandes obras públicas son famosas por las “Metidas de cascos” (con patas y todo); en donde los dueños del poder, en plena campaña dicen a sus electores que, están ”Trabajando como caballos»; entonces, en un lugar así, saber de “relinchos” es un valioso atributo, adicional a saber pegar afiches con engrudo en campaña, para tener opción de contratar.
Para guiar la movilidad, que hoy “Cabalga” en un desorden aterrador, en donde la gestión administrativa no va a “la carrera”, apenas va a paso “Trotoncito galopero”, acaban de llevar al personaje que puede comulgar sin enjalmar, en éste coro de rebuznos y relinchos, que es la administración local.
Al conocer ésta semana el nombramiento de un tal “Calvo”, No pude resistir la tentación de recordar al neardertal que, presidiendo la corporación pública departamental más importante de la región, llevó a sesionar una yegua, ¡Siiiiiii! Así como dice, una yegua de carne y hueso, (Nada que ver con Paloma ó Fernanda), GAVIOTA se llamaba la “honorable bruta” y Calvo el apellido del “Honorable autorizador” en un recordado foro cafetero, más famoso por los relinchos de “Gaviota” y los “gases” del autorizador, que por los acuerdos con los cafeteros en vía de extinción.
Parece que fue ayer cuando el equino posó sus delicados cascos en el finísimo piso de la Honorable Asamblea, se nos vino a la memoria el nombre de Inciatus, el brioso caballo de Calígula, el demente emperador romano que le hizo nombrar cónsul de Sitinia, aprovechando la condición pusilánime y servil de los “otros honorables”, probablemente coincidiendo con el “tal Calvo”, en que, el desprecio por las instituciones se manifiesta con relinchos.
Desde aquel día, Gaviota se convirtió, en la historia de la región, en la yegua de mejor perfil político, gracias a la iniciativa y autorización de Calvo. Probablemente pudo ser tan célebre como PEGASO, el primer caballo que entró en el Olimpo y se hizo el preferido de Zeus, dios soberano del aire y la tierra; algo parecido al otro Zeus que hay por aquí, a quien Calvo hace constante lisonja genuflexa con incienso y relincho incluido, camino a lo que los “del cambio” ya “Kontaktan” para un cupo en el Senado (Citicos, ¡Me da un pesar!).
Con la llegada del honorable autorizador de equinos en los recintos de pensamiento político al gallinero local, no me extrañaría que se produjese una creíble simbiosis hombre- caballo -gallo, con cascos y plumas, como Pegaso, y así el vuelo del gallo podría ser poderoso. ¿Vos te imaginás el Centauro matecaña? ¿Con dorso de hombre fornido y hermoso, cuerpo de yegua y patas de gallo?, solo así podría explicarse tanto rebuzno con pandemia y sin pandemia para que, ésta sea una ciudad abierta 24 horas.
No es una locura la simbiosis presentida atrás, ya ocurrieron simbiosis hombre – equino y otros animales que cambiaron el destino de los imperios. BUCEFALO por ejemplo, fue el caballo inseparable de Alejandro Magno el primigenito del Rey de Macedonia Filipo II, creador de la famosa falange macedónica y el más grande de los guerreros de la historia humana. Desde luego que Bucéfalo era negro azabache y Gaviota tan blanca como la espuma de la babasa política local, aunque es un grosero atrevimiento insinuar algún parecido de Calvo, Gallo y Maya con Alejandro Magno; baste decir que el más grande de los conquistadores amplió el imperio de su padre mientras que Maya, y Gallo con Calvo, ampliaron los problemas de la ciudad, y lo único negro que se le nota, es su futuro en la política.
Y es que en la historia hay cuadrúpedos blancos, tan blancos como Gaviota, KANTAKA era la reluciente yegua sobre la cual Sidharta Gautama, Buda, profetizó la idea del Islam y LAZLOS el blanco corcel del desierto en el que Mahoma hizo su primera peregrinación a la Meca. En el corán dice : “Mientras más granos de cebada des a un caballo árabe, más pecados te serán perdonados”. Eso explica la relación hombre-caballo por más de trece siglos, materializada en éste platanal con una inocente yegua que, en la plenaria de la duma departamental, respondía con relinchos, los rebuznos que escuchaba.
¿Y cual es el caballo? Nadie, en ésta fábula, podría atinar cuales son los arrieros y cuales los cuadrúpedos, pero queda claro que se identifican en que manejan la cosa pública con los cascos y necesitan de un “sabedor” de relinchos, para que desde el caos de movilidad que padece la ciudad, lleven como “burros” a cuantos Kontacktos tengan, al corral de las elecciones, para la que ya están “relinchando” perdón, “Trabajando” como Caballos.
Juro por las cenizas de mi abuela (Que fumaba verracamente) que, no sé mucho de relinchos, no podría diferenciar el valor de los relinchos de ROCINANTE, el lánguido jumento de Don Quijote, ó ViCIR, el valiente caballo de Napoléon, o el de PALOMO, el blanco caballo de Bolivar, o los de la “arrechura” de AS DE OROS y SIETE LEGUAS, los caballos del rebelde Pancho Villa, o quizá de los fantasiosos y justicieros relinchos de TORNADO, el Caballo del Zorro; o PLATA Y PINTO, los caballos del Llanero solitario y su inseparable compañero ,Toro.
Los que saben de relinchos le dan un sitio en la historia a los nobles brutos por su relación con las conquistas, los profetas, por su proximidad con los dioses del olimpo, por su inteligencia. Los que conocimos la historia de GAVIOTA, “La Honorable Bruta”, le damos un sitio en la historia de lo absurdo en el “Honorable Establo”, y porque el “Honorable Autorizador”, con su “Kontakto” en el tercer piso, entre relinchos y rebuznos hace rato perdió la confianza de sus electores; Así, entre relincho y relincho quienes en algún momento se hicieron llamar “El gobierno del cambio” están valiendo lo que vale un ataud de segunda. Tiene más futuro la semana pasada. Es una alianza insobornable, porque no vale Ni Cinco.
P.D. Un chistoso, de esos que van por ahí, dijo que le preguntaron al señor de la movilidad que ¿DE cuantos caballos es esa camioneta oficial?, y dizque respondió, ¡ De uno solo, del alcalde. JeJeJeJeJeJe
Ahí les quedo..
Doctor, el individuo al que hace alusión su muy buen artículo ¿será acaso el mismo animal que propuso la separación del corregimiento de Caimalito de Pereira y ser parte de La Virginia?