La información suministrada por el agente liquidador de Corpereira, John Omar Candamil, en un encuentro con la prensa, en la que explicó los alcances del Auto proferido por el Juzgado Primero Civil del Circuito que adelanta el proceso de liquidación judicial y sendas comunicaciones enviadas por esta dependencia al Ministerio del Deporte, la Dimayor y la Federación Colombiana de Fútbol, ratifican que –momento- la legalidad acompaña al Deportivo Pereira y que podrá jugar sin problemas la fase de los cuadrangulares, a la que clasificó con argumentos en la cancha.
Según el Juzgado el proceso aún se encuentra en trámite por resolver, ante los recursos de reposición y queja presentados por algunos acreedores, razón por la que dicho auto proferido el 4 de octubre para la adjudicación de los activos de Corpereira –entiéndase Deportivo Pereira- aún no se ha ejecutado.
Todo el escándalo desatado en el seno de la Dimayor, promovido por quienes quieren ganar en el escritorio lo que perdieron en la cancha, deja muchas reflexiones no sólo en torno a la feroz pugna que se siente entre las partes vinculadas al proceso de liquidación de Corpereira, sino sobre las aguas turbias que se mueven al interior de la Dimayor, agitadas por los intereses de sus clubes y sus dirigentes y el desempeño de los medios de comunicación, entre la desinformación y las prebendas que agobian el ejercicio del periodismo.
El fútbol profesional es un negocio que gira alrededor de millones y millones de pesos, por eso ha sido tan doloroso para Nacional y Bucaramanga –este último que demandó el partido- la clasificación del Pereira, mientras que Patriotas y Tuluá, ambos de regreso a la ‘B’ se resisten a aceptar el protagonismo ‘matecaña’ alcanzado en la cancha, no en el escritorio.
Con respecto al manejo periodístico que se le dio nacionalmente al caso, quedaron al desnudo cuatro grandes males que afectan ‘el deber ser del periodista’: la desinformación, el sesgo que trae escondida su intención, el amiguismo y la soberbia de los que pontifican.
En torno a los ataques que ha recibido el Deportivo Pereira, nacidos al interior de la Dimayor, debemos unirnos todos en su defensa, porque hay argumentos para hacerlo. Todos, incluyendo la prensa, sin menoscabo de su independencia crítica frente a la gestión administrativa del equipo, porque esta vez la razón le asiste a su actual manejador.
Ahora, si está claro que de cara al futuro la situación es complicada pues la sociedad conformada por los acreedores para recibir al Pereira tiene muchos enredos para obtener el reconocimiento deportivo. En proximo articulo nos referiremos al tema
Respetado Columnista:
Admirable labor por parte de:
_ John Omar Candamil: hoy 4 de Noviembre, sueldos a jugadores y cuerpo técnico a la orden del día.
_ Cuerpo Técnico: comprometido, aguerrido en la propuesta de buen fútbol.
Trabajo desde la defensa , centro del campo, y delanteros , con estrategias de juego moderno
_ Los Jugadores: con amor propio, con respeto a su profesión, respeto a sus hinchas.