Germán A. Ossa E (Columnista El Opinadero)
Mis lectores, muy probablemente pocos, serán los únicos que sepan de qué les quiero hablar hoy. De Luis Eduardo Aute, un poeta, un cantante, un pintor, dibujante, un intelectual puro. Pero que también fue un cineasta, cinéfilo y cineísta grandioso.
Recuerdo en el 2002, cuando fui invitado como Jurado de documental sobre arte en ese hermoso Festival de Cine de Bogotá por Henry Laguado, su director, cuando entré a la sala de cine de la pequeña Cinemateca Distrital, con el teatro lleno y en la pantalla, ya a oscuras, se proyectaba “Un perro llamado dolor”, cuando ese corazón que tengo en el pecho, empezó a latir más aceleradamente, pues nos habían comentado que esa película no llegaba.
Mi emoción me puso a buscar la gente que la había traído y la cinta llegó por correo y no tenía representación, pero en uno de los sobres que había en su equipaje, apareció el correo del poeta y ese fue el medio por el cual pude hacerme a la película y entablar una amistad muy bella con el autor de “Alevosía”, una de sus canciones mundialmente famosas. Sus conciertos no le permitieron aceptar la invitación a nuestros Encuentros de Críticos de Cine, pero siempre manifestó un hermoso interés.
Esta película la hizo tras cinco años de intenso trabajo, un proyecto de animación para el que realizó más de cuatro mil dibujos a lápiz. El film se publicó en formato DVD, acompañado de un disco con la banda sonora, compuesta por el propio Aute, Silvio Rodríguez, Suso Sáiz y Moraíto Chico.
El cineasta y músico, en 2002 publicó el libro Volver al agua, una recopilación de toda su obra poética, que incluyó los libros La Matemática del Espejo, La Liturgia del Desorden y Templo de Carne.
En 2012 puso a la venta El niño que miraba al mar, CD con 12 temas nuevos acompañados de un DVD con la película de animación El niño y el basilisco, obra del propio Aute. A fines de noviembre de ese mismo año, colaboró con María Dolores Pradera en su disco Gracias a vosotros, interpretando a dúo el popular bolero «Caminemos».
En 2013 colaboró en el CD Manual para olvidados, del poeta mexicano Paco Álvarez, musicalizando e interpretando el texto «Aunque solo sea uno», En esta especie de libro – disco también participaron otros escritores y cantautores como Elena Poniatowska, Jaime Sabines, Tania Libertad y Santiago Feliú, entre otros.
En 2015 recibió un homenaje por su trayectoria tanto en la música como en la pintura y en el cine, en la Mostra Viva del Mediterrani de València.
El 10 de diciembre de 2018, una veintena de artistas y admiradores celebraron el concierto homenaje Ánimo Animal en el antiguo Palacio de los Deportes de Madrid. Entre ellos, estuvieron Silvio Rodríguez, Joaquín Sabina, Joan Manuel Serrat, Ana Belén, Massiel, Víctor Manuel, Dani Martín, Jorge Drexler, Pedro Guerra, José Mercé, Rozalén, Andrés Suárez, Miguel Poveda, Ismael Serrano, Luis Pastor, Marwan, Vicente Feliú, Rosa León, Los Tambores De Calanda, Cristina Narea, cómplice escénica de Aute durante dos décadas, y Suburbano. El músico José Antonio Romero (colaborador de Víctor y Ana, Serrat, guitarrista y productor de Sabina), asumió la dirección musical.El artista y cantautor no pudo acudir a la cita, pero siguió de cerca todo.
Aute falleció el 4 de abril de 2020 a los 76 años en un hospital de Madrid en el que fue internado veinticuatro horas antes. La familia no ha podido saber si falleció por el COVID-19.
Y para mayor asombro de los que no lo conocen sino como cantante, aquí les va su Filmografía:
Senses (cortometraje, 1961); Días de viejo color (1967); Minutos después (cortometraje, 1970); Chapuza (1971); A flor de piel (cortometraje, 1975); La viuda andaluza (1976), compositor; Los viajes escolares (1976), compositor; Esposa y amante (1977), compositor; In memoriam (1977), compositor; Mi hija Hildegart (1977), compositor; ¡Arriba Hazaña! (1978), compositor; El hombre de moda (1980), compositor; El muro de las lamentaciones (cortometraje, 1986); El vivo retrato (1986); La pupila del éxtasis (1989); Un perro llamado Dolor (2001), director; Delirios de amor (1986), director y guionista; El niño y el basilisco (2012); Tras Nazarín (2015), actor y compositor y Vincent y el Giraluna, hermoso homenaje a Van Gogh.
Dolor, era el nombre del perro de Frida Kahlo, de ahí el título de su largo y la razón de ser de su vida artística.