La Vida es el valor fundamental, sin ella no existe universo, tiempo, dinero, ni cultura, ni política. Muchos dicen que las cosas existen aunque no estemos, pero en realidad sólo existen para quienes están presentes.
La vida no consiste solo en respirar y moverse, eso lo hacemos para sobrevivir; la clave real está en la presencia.
Estamos presentes con el lenguaje de la palabra, del cuerpo, del vestido, con la fuerza de la mirada, con el escrito, con el calor humano, con el aliento de nuestra respiración, con el movimiento de nuestro cuerpo, con el pensamiento y con todo nuestro ser y voluntad.
Vivir es comunicarse, es hacer que el mundo y los demás sientan nuestra presencia.
Vivir es afectar positivamente a los demás, lo cual no es posible, cuando nuestro cuerpo hace lo opuesto a lo que dicta nuestra conciencia.
Atención a quienes asumen el hábito de hacer cosas ocultas que afectan a los demás: la corrupción, la trampa, el engaño dañan su coherencia, debilitan su presencia y dejan de vivir. Porque para hacerlo deben convencer a su corazón de argumentos sin verdad ni lógica y nuestra naturaleza aunque permite la fantasía y los sueños, estos son para construir el futuro y no para justificar el presente ni para describir el pasado.
Vivir es construir, opinar y transformar insumos en objetos, es convertir la enfermedad en salud, el odio en comprensión y la indiferencia en amor.
Vivir es contagiar de lo bueno al otro, es dejar huella en el universoes inmortalizar el nombre en la historia. Vivir es crear, disfrutar, reír y discutir.
La ausencia jamás será vida, la desconexión siempre nos aleja de ella, la inercia la oculta, la procrastinación la posterga y el vicio la distrae.
La parálisis que producen el miedo y la indecisión suspenden la vida en el espacio y el tiempo, mientras que el odio suspende la del otro en nuestra vida y con eso se detiene el aprendizaje.
El secreto de la vida está en la presencia consciente de lo que pasa en cada momento, de la otredad a la palabra, de la emoción y el pensamiento a la acción, del sujeto, al objeto y lugar.
El secreto de la vida está en la amplitud de conciencia, en la generosidad de nuestras acciones y en la coherencia de la comunicación.
El secreto de la vida está en el amor por lo superior, por uno mismo y por el entorno.
Estoy de acuerdo en lo que plantea.
Además creo que vivir en ocasiones es una lucha por ser lo que el mundo niega y rechaza, siempre en pro de un mejor futuro común
La vida es saber apreciar todo lo que nos rodea, y sobre todo tener presente que en ella está el amor de Dios
Así es Olguita, un gran abrazo.