Si el niño o el joven pregunta y busca respuestas y explicaciones, téngale paciencia y oriéntelo… Hay niños y jóvenes que requieren que se les repita lo que ya les dijo o tienen más confianza en usted como padre o madre para que se los explique.
Recuerde que si el niño o joven le pregunta y usted le responde con un regaño o le rechaza su pregunta con “Y usted cómo no sabe eso o las bobadas que pregunta o usted es que es pendejo o qué” usted lo está rechazando y lo termina alejando ¿y en dónde va él a consultar? A alguien que lo puede desorientar; a alguien que si lo escuchó para inducirlo a otras cosas menos convenientes para él y para usted.
Todo lo anterior para decirles que muchos casos de suicidio se presentan porque el niño o joven llama la atención de quienes consideran que son importantes en su vida y cuando no hay escucha, acompañamiento o comprensión, considera el suicidio como una opción.
Se construyó, a finales del siglo pasado, el puente atirantado que une a Pereira con Dosquebradas sobre el río Otún, con una extensión cercana a los 800 metros o 10 cuadras aproximadamente y no faltaron los que llegaron a “inaugurarlo” lanzándose al vacío. Muchos han dicho que hay que respetar esas decisiones y el que se quiere tirar “a ver si vuela o a ver si flota” no debería impedírsele tamaña iniciativa.
El que llega a ese punto, suicidarse o interrumpir su existencia, es posible que sepa que de esa manera altera el plan de trabajo que se trazó para esta existencia. Si lo sabe, es porque se siente muy consciente de lo que va a hacer y que nada se lo debe impedir y lo ejecuta lanzándose del viaducto, arrojándosele al bus articulado del Megabús, tomándose un veneno o usando cualquier otro método.
De cualquier modo, lo que debemos advertir ese que somos un espíritu que debe dominar este armazón de huesos y carnes y no, como a veces ocurre, que la satisfacción de la materia lleva a enfermar al espíritu, de tal manera que la única posibilidad que tiene es la puerta falsa del suicidio.
Hay quienes se suicidan lentamente consumiendo lo que saben que les causa daño emocional, psicológico y orgánicamente.
Uno es libre de elegir si fallece o no suicidándose. Hay quienes han elegido fallecer de manera inducida (porque lo han pedido) y acompañado para su desenlace y han obtenido la autorización “legal” desde el punto de vista médico y jurídico a través de la eutanasia y en Colombia son muchos los casos conocidos.
El 10 de septiembre es conocido como el Día Mundial de la Prevención del Suicidio y al que intenta suicidarse o tiene la idea de suicidio y se le impide hacerlo por muchos factores: Le hacen pasar la pena, se superó emocionalmente, le ayudaron a valorar la vida, solo llamó la atención de los organismos de socorro, sus problemas económicos se le solucionaron, retornó el ser amado cuya ausencia le hizo pensar que no soportaba estar solo; etc., me pregunto si ese que intentó suicidarse ya lo superó en definitiva o si fallecer no le importa, la vida no le importa y como dice una canción popular “es lo mismo morir tarde que temprano”.
Entonces, debemos traer a colación lo elemental de la enseñanza trascendental para entender el suicidio y es solo desencarnado; es decir, el espíritu libre de la carne de la materia, solo desencarnado puede ver las opciones que tenía para salir de los problemas que lo encerraron o le eliminaron las posibilidades de avanzar, y se sintió acorralado, decepcionado y desvalorizado y tomó la fatal decisión.
Y cuando ve las posibilidades, ya no hay manera de retornar a ese cuerpo en el que el propició la interrupción de su existencia, Por eso, desde ahora, hay que educar sobre el principio que somos espíritus que traemos un plan de trabajo para realizarlo con el cuerpo que tenemos y que alterar ese plan va a ser peor porque luego las circunstancias serán distintas para cumplir lo que nos habíamos propuesto, consciente o conscientemente, en esta existencia.
Este último párrafo lo entienden los que saben que no vivimos solo una existencia sino que la vida es eterna y continuada por la eternidad del espíritu que necesita encarnar miles de veces para aprender a amar acatando la Ley Universal del Progreso y la Ley de la Creación, que son eternas como la vida misma.
………