¿Juegos nacionales en riesgo?.

En estos días conocimos la alerta producida por la Controlaría General de la República donde advierte el retraso en el cronograma en la construcción y adecuación de los escenarios deportivos que recibirán las diferentes modalidades de cara a la realización de los XXII juegos nacionales y VI paranacionales a realizarse en el mes de noviembre de este año en el eje cafetero. El ente de control advierte que de los 23 escenarios deportivos que deben estar listos, 2 han iniciado obra, presentando un retraso del 77% y los otros 21 están en fase de revisión de diseños, estructuración y adecuación de terrenos. De igual manera advierte que tres proyectos tienen inviabilidad técnica según lo establece la normatividad y lineamientos de acuerdo a la Resolución 601-2020 y un proyecto presenta incertidumbre en su financiación por diferencias entre los entes territoriales. A los anteriores problemas en materias de ejecución, se suma la interinidad por parte de las directivas que presentaron su renuncia en el mes de diciembre, quedando acéfala la dirección de tan importante organización nacional. Mediante comunicado dirigido al presidente Petro, los tres departamentos organizadores de los juegos, exponen sus preocupaciones en las cuales en su mayoría endilgan responsabilidad a la nación por el retraso en la organización de las justas. Entre los argumentos del comunicado se encuentra la falta de diligencia por parte del Ministerio de Deporte donde se demoraron más de un año para la revisión y aprobación de los proyectos y diseños, los cuales no han tenido el compromiso y la respuesta esperada para la viabilidad técnica; de igual manera recalcan la demora en las disponibilidades presupuestales para la ejecución en los proyectos, la dilación en el aval de compromiso del documento Conpes, la falta de asignación de interventorías, demora en la firma de convenios necesarios para la compra de insumos y equipos especializados. De igual manera un aspecto casi increíble es que frente a tal desorden presentado no se hayan conformado las mesas técnicas y comisiones operativas de deportes y no se tiene claridad frente a los protocolos logísticos que se deben implementar. Con lo anteriormente expuesto se pone en riesgo no solo la construcción de varios escenarios sino la realización de 6 deportes paraolímpicos. En Pereira se encuentra en riesgo el coliseo multipropósito, la pista atlética, el coliseo mayor y el velódromo entre otros. Los mandatarios del eje cafetero han endilgado gran parte de la culpa de tal situación al gobierno nacional a quien señalan de falta de compromiso y negligencia en la gestión que se debe realizar, faltando colaboración armónica con los tres departamentos. Sin embargo en medio de este rife y rafe, a nivel regional también se le endilga gran cuota de responsabilidad a los mandatarios de los entes territoriales por falta de organización en los tiempos, desarticulación y divisiones entre alcaldes y gobernadores, falta de voluntad para la disponibilidad de los recursos, negligencia en la planificación y emisión de diseños y falta de apoyo de la clase parlamentaria, que le ha faltado perrenque para gestionar el proyecto ante las instancias nacionales. Por todo esto, se está amenazando con llevarse las modalidades más importantes para el Valle del Cauca, donde dicen que la exgobernadora Dilian Francisca Toro, está moviendo cielo y tierra para que así sea. Es triste que nuestro departamento pierda esta valiosa oportunidad, no solo para modernizar sus escenarios deportivos con importantes recursos de la nación, sino también para generar importantes fuentes de ingreso como ventana comercial, que puede generar una gran oportunidad al turismo, la gastronomía y al sector hotelero entre otros, ojalá los juegos nacionales no nos queden grandes.