Por FEDERICO GÓMEZ ISAZA
Hoy, por motivos del destino me encontré en una red social el video con la grabación de la sesión del concejo de Pereira del 3 de julio de 2020, titulada: Sesión del concejo invitados Cámara de Comercio de Pereira. Debo decir que, en circunstancias normales, NUNCA me hubiese interesado por ver ese video. Pero dadas las circunstancias actuales que atraviesa de la junta directiva de la Cámara, me ganó la curiosidad y lo vi.
Para mi sorpresa, y por lo que pude ver, para sorpresa de los mismos concejales, el presidente ejecutivo de la cámara y el Presidente de su junta de la CCP rechazaron la invitación, aduciendo que el concejo no es instancia de control de la cámara.
Si bien, los mismos concejales estaban de acuerdo con esta afirmación, todos sin excepción, estaban sorprendidos, por no decir, ofendidos por el desplante hecho por los directivos de una organización tan importante para los Pereiranos. Sin embargo en la carta donde se excusaban los directivos de la cámara, hacían la invitación a un comité del concejo, para discutir las circunstancias actuales a “puerta cerrada”. Invitación que rechazaron la gran mayoría de los dignatarios, quienes en sus intervenciones mostraban gran desconfianza y disgusto.
Cabe resaltar que la invitación a participar en la sesión del concejo si fue aceptada por los ex miembros de junta designados por el gobierno nacional, y quienes presentaron su renuncia hace muy poco.
Los “otros”, que si intervinieron, tuvieron una oportunidad de oro para expresarle a la “junta directiva” de la ciudad los motivos por las cuales habían renunciado a su designación.
Josué Caballero, Juan Guillermo Ángel y Luis Fernando Ossa, expusieron su extrañeza ante la posición de algunos miembros de junta de la cámara que se niegan a establecer medidas de control y que no permiten que se haga una auditoria.
Uno a uno, fueron llegando a la misma conclusión. ¿si todo se está haciendo tan bien, y no hay nada de malo, por qué no hacer una auditoria mas profunda? Una auditoria que examine un porcentaje mayor de los movimientos financieros de la cámara, y las implicaciones de los graves cambios hechos a los estatutos de la corporación.
Definitivamente, se notaba en el ambiente una sensación de falta de transparencia. Pero lo peor fue ver cómo uno tras otro los concejales iban sacando sus propias conclusiones.
Fue evidente que los directivos de la CCP dejaron pasar una oportunidad valiosísima para dar su versión de lo que estaba sucediendo. Por el contrario mostraron una imagen arrogante, acompañada de un desplante horrible, que no colabora mucho en la tarea de convencer a la opinión publica de la transparencia de los procesos que se llevan a cabo en la veintitrés con octava.
Todos sabemos que la cámara de comercio es una corporación de gran valor para la ciudad, que maneja recursos públicos y mantiene convenios con el municipio. Solo por eso, debieron aceptar la invitación, pero no nos digamos mentiras, se escudaron en un argumento muy pobre para evadir un debate.
Eso si, cuando necesitan que el uso del suelo sea modificado para llevar a cabo sus proyectos, como evidentemente pasó con el problemita del World Trade Center, o para la aprobación de los tantos convenios que involucran la plata de la ciudad, ahí si están de primeros en la sexta con veintidós. Ahí si no tienen problemas rindiendo cuentas y aceptando invitaciones. Para unas si! Pero para otras no!
Y aquí entre nos, EL QUE NADA DEBE, NADA TEME!!! Pero al parecer en la cámara últimamente son muchos los “pasivos” y aun mas los “temores”.
81% es bueno o malo?
Vi al Presidente ejecutivo de la Camara de Comercio sacando pecho porque el 81% de las decisiones se toman por consenso, y porque las reuniones son en promedio de 4 horas.
He hecho parte de muchas juntas directivas. y nunca se ha llegado a que el 19% de las decisiones hayan tenido que ser votadas, o que no haya consenso. Cual es la importancia de ese 19%?
De nada sirve tener consenso en ocho de cada diez decisiones, si en las otras dos, que son las realmente importantes, no son capaces de ponerse de acuerdo. El 81% es una cifra muy bonita cuando hablamos de los niveles de favorabilidad de un politico… pero cuando se habla del porcentaje de las decisiones que se toman por consenso en una junta directiva, puede llegar a ser una cifra preocupante. Solo imaginese. ¿como seria un negocio donde los socios no se pueden poner de acuerdo en el 20% de las decisiones?
Por ultimo, En reuniones de junta de 4 horas en promedio se pueden hablar muchos temas, pero también he estado en juntas de 1 hora donde se toman decisiones muy importantes, y otras de seis horas que resultan ser un saludo a la bandera. Cronometrar las juntas directivas no dice NADA!!!