O cómo funcionan gobiernos fascistas (Israel) y mafiosos (Colombia)
Pegasus malware, programa espía desarrollado por la compañía Israeli NSO Group, puede acceder a la información más privada de un dispositivo: Desde mensajes y llamadas hasta el acceso remoto a la cámara y el micrófono, convirtiendo a cualquier teléfono en una herramienta de espionaje sin que usuario lo sepa.
Para la seguridad nacional de cualquier país del mundo, este sería el campanazo de alerta más grande que pudieran tener, sobre la existencia de programas invasivos. Pero para los medios comerciales (que venden noticias y opiniones según el mejor postor), este era un refrito del presidente (por cuanto la primera noticia había salido al aire desde comienzos de año en la prensa Israelí y un programa virtual en Colombia), cuando realizó la denuncia.
A todas luces salta a la vista que estamos ante un hecho de profunda gravedad política, criminal y judicial.
Primero por la forma en que se efectuó la compra de dicho Programa, compra confirmada por los Observatorios Internacionales sobre lavado de activos, de Suiza y del propio Israel, que detectaron la transacción: Nadie sabe quién la hizo, siendo una compra oficial su pago se realizó en efectivo en tulas o maletas al mejor estilo narco, que un general del ejército Israelí haya autorizado a un banco para recibir 13 millones de dólares en efectivo (un lavado de activos?), peor aún no figura en los inventarios de ninguna entidad de seguridad del estado, es decir, no se sabe quién lo tiene y quién lo está usando para chuzar cualquier teléfono existente en Colombia o en el mundo.
No nos crean tan pendejos, que es un refrito, semejante amenaza a la seguridad nacional, decir eso es convertirse en cómplice de quienes realizaron ese acto criminal e intentar lanzar un manto de impunidad sobre tan aberrante hecho.
Los organismos de seguridad del estado, DNI, Fiscalía, Inteligencia Militar, Contraloría, Procuraduría deben ponerse al frente de tan importante y vital investigación, para que se esclarezcan todos los interrogantes que existen alrededor de este delito.
Y que caigan todos los implicados, que deben ser del más alto rango en el gobierno en el que sucedieron los hechos, desde el presidente de la época Duque que estuvo en Israel la misma semana en la que se dio la compra, generales de la república, ministros, asesores y privados que fungieron como intermediarios en la misma.
También para poner en su real condición de auspiciador del terrorismo internacional, como lo es el actual gobierno Israelí, que además de invadir, bombardear y cometer genocidio contra el estado Palestino y ahora la emprende contra el Líbano, lo que hasta hoy hace impunemente, por tener el respaldo de los EU.
ADENDA: La Corte Constitucional y el Consejo de Estado con su maniobra de corto vuelo, han demostrado que el “Cartel de la Toga”, aún subsiste, pues ponerse de acuerdo ladinamente para tratar de asegurar la Procuraduría para el corrupto Cambio Radical, al designar cada uno candidato de esa misma colectividad, han demostrado lo bajo que han caído las altas cortes.
Con ello obligaron al presidente también a realizar su propia maniobra de alto vuelo al designar a un candidato, aunque no muy alternativo, si inderrotable, como efectivamente sucedió.
Pereira octubre 2 de 2024