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HumorHistorias, con bobos y avispaos

Historias, con bobos y avispaos

Por: Carlos Alberto Cardona Montoya

CONTRACRÍTICA: Con Humos Amor y Ardor.

Mi abuelo solía relatar la historia del bobo de un pueblo, en donde dos ratas muertas malograron un enorme dulce comunitario en la plaza del pueblo; para no desperdiciar tan abundante manjar, los proveedores, los ricos del pueblo decidieron que nadie comería esa porquería, pero para no botarlo entonces que llamaran al bobo, se lo dieran y así lo hicieron; solo que el bobo, al dar tres vueltas a la enorme paila y ante la mirada de todos,  se metió las manos en los bolsillos y mostrando su mueco les dijo: EEEEHHHHH, QUÉ VA, SI DE ESTO TAN BUENO NO DAN TANTO y se  marchó dejándoles su manjar servido.

Por analogía, nos está pasando algo parecido según las decisiones que toma el gobierno frente a la exigencia de la pandemia por el Coronavirus. Veamos: Primero fue la testosterona en las trompas de Falopio de la alcaldesa de Bogotá, que obligó a tomar las medidas de emergencia correctas, que debieron tomar muchos días antes: Cierre de aeropuertos internacionales, puertos, cuarentena, ampliación de la capacidad de respuesta hospitalaria etc. Después los decretos y Oh sorpresa, el gobierno godo uribista de la noche a la mañana, se volvió social “protector” de los más pobres y “justo” en la distribución de la riqueza.

Mercados gratis a domicilio, platica para los mas pobres, devolución del IVA, servicios públicos por dos meses, arriendos, aplazamiento de impuestos, priorización de la salud, mejores condiciones hospitalarias y otro montón de dulce podrido, que le dejó a los bancos todos los privilegios vampirescos, ordenados por el Nosferatus y anunciando la resurrección para el 27 de abril, cuando los datos del Increíble INS indicarán que es hora de poner a funcionar el aparato productivo; eso explica lo de  los dineritos fácil y justo, poquito pero bendito, para los más pobres, y el extraño manejo de los datos de infección y muerte, como si el virus ya no estuviera más allá afuera, después del 27.-  EEEEHHHHH, QUÉ VA, SI DE ESTO TAN BUENO NO DAN TANTO.

 En lo que sigue, es donde está la rata muerta del dulce, siguen en cuarentena los niños, los estudiantes y los más viejos (Que no son productivos) regresan a producir los trabajadores de las empresas  como también toda la masa de rebuscadores es decir, son los que se exponen porque el tal virus estará ahí, totiao de la risa, mientras los dueños del capital, los más ricos, incluidos Nosferatus y los otros vampiros, se guarecen en donde el virus no los mirará ni para escupirlos.

A otro bobo, en otro pueblo, arriba en un árbol de aguacate en el centro de la plaza le preguntaron lo que hacía allá arriba, les contestó: “Aquí comiendo uvas”; le ripostaron que era imposible, porque ese era un palo de aguacate y él les contestó: “AHHH si, yo sé, pero es que las uvas las tengo en ésta chuspita”.}

Sería chistoso si no fuese por lo cruelmente parecido a la realidad de  las contrataciones express de ayudas humanitarias en los gobiernos locales, La inmensa mayoría de la población pobre (los bobos) está esperando que se materialicen las ayudas prometidas, mientras los chulos de la contratación, duplican y triplican los precios base para comerse sus uvitas, ¿Si pilla? Ni bobos que fuéramos todos.

Otro bobito era célebre en mi pueblo, cuando entraba al billar, los borrachos lo retaban a que escogiera entre dos monedas una pequeña de 500 pesos, y una grande de mil, el bobo siempre cogía la pequeña, y además de quedarse con ella también se quedaba con la burla de todos por lo pendejo.- Un día, un buen samaritano le explicó que la moneda grande era mas valiosa y podría comprar más dulces, y el bobo le contestó: “AHHHH YO SÉ, PERO  ES QUE EL DÍA QUE COJA LA GRANDE, SE ACABA EL JUEGO.”

La historia tiene que ver con el gobierno nacional, al que la inteligencia lo persigue, pero el gobierno es más rápido”, no se deja alcanzar. Por ahora obedece el privilegiar la producción por sobre la vida, con lo que tomará créditos del FMI, amasa otra reforma tributaria y se hace aplaudir de los banqueros, dueños del gobierno; eso es coger la moneda chiquita, por qué, cuando coja la moneda grande; es decir, nacionalizar los hospitales, los bancos y racionalizar las tarifas de  los servicios públicos, apretar los bancos, distribuir los excedentes financieros entre los pobres, ese día se acaba el jueguito..- ¿Si pilla?, que no nos cran tan bobos. Ó ¿Porqué todos los billones destinados en la emergencia no se tramitan por el Banco Agrario que es del Estado, más barato y más fácil?

Sin bobadas, hay que reconocer que éste gobierno nació en cuerpo ajeno y es impopular, y con lo hecho hasta ahora con el coronavirus. está demostrando tener grandes posibilidades de desarrollar ambas propiedades. Serio, no es bobada mía.

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