Terminando este mandato municipal quedamos con muchas dudas y preocupaciones frente a la gestión y los logros de esta administración. Comenzando el gobierno en el primer semestre del 2020, el alcalde presentó a la ciudadanía los 17 proyectos estratégicos que le darían identidad, sin embargo, al día de hoy los resultados son muy pobres, de los cuales cuatro se encuentran en algún tipo de avance, donde los otros 13, lacónicamente podrán lograr su culminación. El discurso expuesto el primer año todavía sigue siendo muy parecido a la retórica actual donde ya el tiempo está pasando cuenta de cobro. Comencemos con la MOVILIDAD, la ciudad en estos cuatro años no pudo realizar obras de infraestructura al problema de los puntos críticos de las glorietas de la ciudad, promesa de campaña incumplidas, sintiéndonos engañados y donde proyectos estratégicos como la 1ª. y 2ª. fase de Los Colibríes, tampoco serán concluidos en esta administración a pesar de haberse empeñado los recursos de vigencias futuras, tampoco se pudo realizar la tercera avenida o la doble calzada de la Av del rio Otún, solo la obra vial del aeropuerto financiada por el gobierno nacional se pudo terminar. VIVIENDA. El alcalde no fue capaz de iniciar nuevos proyectos de vivienda que mitigaran el déficit cualitativo y cuantitativo cercano a las 30.000 mil unidades, por el contrario proyectos que venían en curso como Santa Clara en sector de San Joaquín y Guayabal en Villasantana llevan suspendidos más de un año de manera indolente sin que los beneficiarios adjudicados tengan algún tipo de solución. SEGURIDAD, a pesar que la administración argumenta que la tasa de homicidios ha sido reducida, sectores como Caimalito, Puerto Caldas, El Rocio y Villasantana superan la media nacional; la percepción de inseguridad ha aumentado debido a los problemas de iluminación y falta de apoyo y reacción de las autoridades. Los hurtos a personas aumentaron en el 2022 en un 39%, a motos y vehículos en un 31% y residencias un 9% entre otros. EQUIPAMIENTO Y ESPACIO PÚBLICO, la mayoría de los parques de la ciudad se encuentran en un estado lamentable de abandono, suciedad e inseguridad, entre ellos el parque de La Libertad, El Lago y el Olaya, el parque de los estudiantes en Álamos tuvo una inversión de 1.500 millones y se encuentra solo, inservible e inconcluso, la invasión a predios del municipio y el espacio público aumentó en un 300%, corredores como la Cra 10, 11 y 12 son invadidas por los comerciantes de manera inclemente, la calle 13 y 14 cerca a la libertad fue secuestrada por el transporte informal y las bandas criminales . MEDIO AMBIENTE, el malecón del rio Otún y la Ptar a pesar de haber sido mostrados constantemente por el alcalde en los informes de gestión, nunca fueron realidad. TEJIDO SOCIAL. Pereira se ubicó en los primeros lugares a nivel en materia de drogadicción y consumo de heroína, peleándose los primeros puestos con ciudades como Medellín y Cali, la tasa de suicidios del 4,9% supera la media nacional, La tasa de deserción escolar supera el 6%, Pereira es de las ciudades que más se está envejeciendo en el país donde paradójicamente los tres centros vidas como Villavicencio, Oso y Galicia permanecieron cerrados estos cuatro años. DESARROLLO RURAL, la productividad en el campo disminuyó enormemente a pesar de tener más de 150 contratistas en la Secretaría de desarrollo rural, de las 36 mil hectáreas aptas, solo 9 mil son desarrolladas de manera básica con deficiencias del apoyo institucional, el saneamiento básico y la infraestructura vial se encuentra en deficientes condiciones. Los pereiranos juzgaran la gestión del alcalde, este 2023 es un año electoral, ¿será que esto le pasa cuenta de cobro al candidato a la alcaldía de la administración?