El sistema de valor constante, con el que se creó en 1972 en Colombia la Unidad de poder adquisitivo constante – UPAC, en el Gobierno de Misael Pastrana Borrero, pretendió generar recursos a través del ahorro de valor constante, para impulsar el Sector de la construcción que absorbía en ese entonces la mayor cantidad de mano de obra en la economía, es decir impulsaría el empleo que era uno de los flagelos de ese entonces.
El sistema colapsó porque las fórmulas con las que se establecía el valor de la UPAC en forma diaria, se deformaron, las deudas crecieron desaforadamente, se volvieron impagables para los usuarios y los establecimientos de crédito tuvieron que recibir los inmuebles financiados en dación de pago.
Para reemplazar la UPAC, se creó la Unidad de valor real – UVR, que para su determinación únicamente incluía la variación del IPC del mes anterior a la fecha del cálculo, formula que no ha variado desde el año 1999, cuando fue creada mediante la ley 546 de 1999.
Lo anterior significa, que a partir de la expedición de la ley, el valor de las deudas contraídas en UVR disminuyen en la medida que la inflación es baja y suben en escenarios de alta inflación como el que estamos viviendo.
Como consecuencia de lo anterior, el principal de las deudas constituidas en UVR se indexaron durante el año 2021 en el 5,62%, que corresponde a la variación anual del IPC.
La Junta Directiva del Banco de la Republica de Colombia, tiene por disposición constitucional el control de la Inflación, pero pese a que ésta comenzó a dispararse el año pasado, no ha modificado la meta objetivo anual que se mantiene en el 3%, resultado de un piso del 2% y un techo del 4%.
El panorama de este año no es muy esperanzador para los deudores en UVR, pues 2022 será un año político, el salario mínimo mensual legal fue incrementado nominalmente en el 10,07%, en enero se ha desatado una espiral alcista incontrolable, persiste la devaluación alta del peso colombiano frente al dólar, el panorama mundial y el desempleo, todos estos serán los factores que principalmente impactaran la inflación del presente año.
Excelente artículo doctor Rios. Muy importante poder contar con su opinión en este medio.