Por JESUS ALBEIRO ZULUAGA LÓPEZ
Es un nuevo año, donde se me ofrecen otro grande cúmulo de días encasillados en una vuelta al sol, para dar tantos pasos como horas en este nuevo periodo anual, para continuar construyendo nuestra veeduría del tiempo y el reflejo de nuestro amor a Santa Rosa de Cabal junto a nuestra vocación de caminar por sus calles, viviendo cada momento como se vive una desgracia: con los sentidos bien alertas, serenos ante la adversidad; observando cada objeto como un vecino querido y cada calle como una serpiente que se mueve circundante y cada día nos muestra algo nuevo de sí, interminable. Con la vida y la desgracia, que son equitativos, son conceptos paralelos idealizados diferentes: la vida es una desgracia con varias virtudes.
“He cometido el peor pecado que uno puede cometer. No he sido feliz”
J. L. Borges.
¿Quién lo ha sido? ¿Usted lo ha sido? La felicidad es una convicción más que una realidad, también habló Borges del goce de estar triste. Ser feliz es dormitar ignorando los cuantiosos males del mundo que día a día se presentan y no precisamente entre los bienes, sino, al contrario el escenario planta como fondo las bonanzas y los actores malignos juegan en la tarima su propio drama, tan reales, tan cotidianos, tan evidentes, tantos… La utopía lleva su mismo nombre. ¡Felicidad es buen libro de poesía con todos los versos atractivos a todos los ojos! Usted es feliz cuando la vida transcurre de acuerdo a su voluntad, entonces no es feliz sino satisfecho. La verdadera felicidad es la que existe cuando no hay motivo de su surgir, porque la felicidad es y no se hace o se produce y tal como el sol se mantiene, es un fulgor que permanece allí, a 149,600,000 km. del hombre y como sabemos, aún en nuestro círculo de vida.
Nuestro círculo de vida es nuestro entorno, nuestro vecindario cósmico de rocas, estrellas, personas, pájaros, santos y guitarras, donde una semana es una estrofa pesada idéntica a la anterior, sin editores, sin mando, sin rumbo y sin ortografía, a medida de la medida del timón del marinero recto. La felicidad está lejos de ese camino horizontal, tan caótico en su aparente autonomía.Es este el sentido de un caminante, la soltura en el camino. Como lo dice Cabral, yo no camino derecho, siempre camino torcido. El que camina derecho conoce un solo camino. Es así que la felicidad no está al final del camino sino que está inmersa en él, es el camino mismo, es la forma de tomarla mientras se camina. Cómo no cualquiera ve en la noche, como muchos temen a su ambiente sin luz, como estos seres infelices hay tantos otros que no ven el camino y que nunca se han caído por temor a tocar la tierra con las rodillas y se mantienen estáticos caminando sobre el lugar que ya caminaron 100 veces. Caminar por el mismo camino sin cambio en la brújula y direccionado a volverlo a hacer, también es estarse quieto. No es solo mover los pies en una dirección concreta, es ejercitar la mente y el recuerdo, estimular la vista y la imaginación, es, incluso, ser intuitivo con el asfalto.
Caminar es el ejercicio simbiótico de intercambiar información con todo lo que sale al paso y si nos abstenemos de ello, entonces seremos las piedras que a bien o mal sirven de peldaño o obstáculo a quienes pueden caminar, a quienes le es posible, porque no cualquiera camina.
La felicidad no depende del otro, es aceptarte y crecer con las tristezas, las alegrías, las caídas. Es levantarse cada vez que te caes, eso te hace más fuerte. Gracias señor columnista.
Gracias a ti, Solángel, por leer y por ti invaluable opinión. Un saludo.
En Aristóteles:
» Felicidad : consiste en el ejercicio de la actividad propia de cada ser»
«Todo ser tiende a realizar determinadas actividades, el ejercicio de éstas traerá consigo satisfacción.»
Es esa felicidad académica de Aristóteles.
Muchas por su comentario, Doña Martha Cecilia.
Te amo, mami. Somos felices porque nos sabemos felices.
Más de lo que Quisiera… lo mejor no es sólo Caminar, menos correr por los demás…
Lo Ideal y humano es «Dejar huellas» para que otros sigan el buen camino por y para la Humanidad. ®️🙏😷👍
Huellas dignas de querer ser pisadas otra vez, así es.
Debemos ser felices por todo… pues lo bueno nos llena de satisfacción para seguir y lo malo, llena de experiencias para No Repetir, igual… ambos son nuestra vida, Única e irrepetible.
Camina Plácido de día y de noche, sólo o acompanado, Dios te dará motivos y compañia de ser necesario, fe y esperanza en el mañana, cada día trae su afán.
Sí señor, la vida es el camino, se camina cuando se vive y si no se camina, ni se sueña, pues no se vive.
Gracias por el comentario.
Se feiz por que tienes grandes motivos para hacerlo, y estar sano es un gran motivo y sobretodo con la grandeza que hay ti la riqueza que tu alma invade y el. Futuro bendito que tienes por delante grandes éxitos esperan por ti… Te amo hijo mio