No siempre el «Cambio», es para mejorar

Contracrítica

CON HUMOR, AMOR Y ….ARDOR

El asunto del “CAMBIO”, propuesto por los políticos no es nuevo, de hecho, hizo parte de numerosas discusiones, todas siempre enriquecedoras, con el entrañable y siempre bien recordado amigo Gerardo Betancur; desde aquella campaña  para la primera elección de alcaldes hace más de  30 años, el 13 de marzo de 1988, como una gran conquista de los acuerdos de La Uribe, tras la negociación con el M-19 que terminó con la Constituyente del 91; la misma que las derechas  ultra-godas han  querido “CAMBIAR”, de  articulito en articulito.

Como presagiando lo que  habría de ocurrir después (Hoy, por ejemplo),  Gerardo decía entonces  que: “Este cambio es muy bueno, los alcaldes, y gobernadores  ya no  serán designados  a  dedo por el gobierno nacional de turno; pero ojo, que vendrán otros cambios, que ya no serán tan buenos, la codicia de  los políticos romperá los límites de las ideologías y de los  partidos y los negocios políticos se  van a “parapetar” en esa palabra, “CAMBIO”, y entonces, no será  para mejorar, esto lo van a “putiar”; porque, no siempre los cambios  son para mejorar”; y Zuas, en Pereira, un  payaso fantoche, nuevo rico, mentiroso, promociona en inmensas vallas su poco ingeniosa autoría del “CAMBIO” en una ciudad que efectivamente cambió, ahora está peor que antes .

Por aquellos días, cuando apenas comenzábamos con la cultura de la Internet, Gerardo me compartió una sensacional y divertida fábula con la que trataba de demostrar lo desastroso que es el CAMBIO, cuando éste ocurre en manos incorrectas, equivocadas, mal elegidas, como en efecto hoy ocurre en esta ciudad.

Esa  historia cuenta de  una Hormiguita muy trabajadora que todos los días llegaba muy feliz   a  su tarea, allí, muy productiva, pasaba  las horas tarareando bambucos  y canciones de  amor, como cuando en Pereira hacían convites y entre todos  hicieron un hospital, un aeropuerto, una villa olímpica, traían industrias  y el comercio crecía  y crecía; pero la hormiguita tenía un problema, no tenía un  supervisor. El abejorro, que era el nuevo gerente general consideró que no era posible que alguien trabajase sin supervisión y creó  el  cargo de  supervisor al que aplicó el escarabajo, un bicho jefe de debate del abejorro en su ampaña para gerente, quien conocía  las teorías de Jat, Keinsen, kanban y otras de muy difícil comprensión para lo restantes  seres vvivientes.

La primera preocupación del escarabajo supervisor fue controlar las horas de llegada  y salida de  la hormiga, la otra parte del  tiempo la ocupaba en preparar voluminosos informes,  por  lo que fue necesario contratar a una secretaria para ayudar en esos enormes informes; así que contrataron una arañita muy picuda en ofimática, excel, y call center, que había estado en la campaña del abejorro para gerente, ésta, organizó todos los archivos  y se encargó además del teléfono;  mientras  tanto la hormiguita trabajaba y trabajaba sin parar, ya no trareaba los bambucos de antes, mientras tanto el abejorro gerente, estaba feliz con los informes, sin embargo  pidió cuadros  comparativos, gráficas de indicadores de gestión, y análisis de  tendencias, por  lo que fue necesario contratar un gorgojo especialista en ISO 9001, 14001,  OSHAS 18001, para ayudar al supervisor, también compañero de campaña del abejorro, lo que generó tanto trabajo que fue necesario comprar dos  computadoras, de  las  má modernas.

Un día la hormiguita empezó a  quejarse por todo el papeleo que había que diligenciar cada dia, lo cual reducía gravemente su  productiviidad, el abejorro gerente decidió aplicar una D.O.F.A.  para tomar medidas  urgentes, se creó entonces el  cargo de  gerente outsoursing en el área en donde trabajaba la antes feliz hormiguita productiva, fue  nombrada una  cigarrra glamurosa que además  había ayudado a financiar la campaña del abejorro, así que al recibir su nueva oficina ordenó cambiar cortinas, alfombras, y exigió claro está, nuevo computador e impresora de úlima  generacción.

Después de un Brainstorming, en una reunión de gerentes, se deciidió que era necesaria  un red de información, para  lo cual  se contrató un gerente de sistemas, un curioso piojo egresado de un prestigiosa universidad, experto en windws xp, linux, Oracle, a quien le contrataron una asistente bilingüe, un supergrillo experto en balancee scored, su  tarea era la de preparar el plan estratégico y el presupuesto para  el área en donde trabajaba la hormiguita feliz poductiva, el pimer acto fue contratar un estudio de clima organizacional con una cigarra experta en  couching, clientemanía,  Empowerment,inteligencia emocional y CRM; informe que conluyó en que era necesaria una reorganización, lo que coincidió con una preocupación del abejorrro gerente, La unidad productiva donde trabajaba la hormiguita feliz ya no era tan rentable como antes, por lo que se  estudió  con un Buho consultor, senior de world consulting grup, quien pegó afiches del abejorro en campaña; el camino  a seguir.,luego de tres meses entregó su diagnósttico de inminencia de Quiebra, porque hay demasiada gente trabajando en la empresa, hay que prescindir del personal menos calificado, con lo que en la reunión de gerentes y asistentes se tomó la decissión de despedir la hormiga, un lastre económico imposible de soportar,  que además no estuvo en la campaña del abejorro.

Por analogía,  en ésta  ciudad, tal como lo presagió Gerardo Betancur, hace más de 30 años, y lo explicó en la fábula aquí reproducida, unos parásitos electoreros desaparecieron de la nómina oficial a los expertos en planeación, en salud  pública, en educación, en construcción social, y los reemplazaron  con licenciados chambones que hacen pasar  la glorieta de Corales como  una  gran  obra de ingenniería con pasos  elevados,  mentira;  El manejo de la pandemia, un desastre, La política pública de redención social, un engaño, el aumento de la inseguridad, prostitución, tráfico de drogas  es insoportable.

Entonces, ese “CAMBIO” en el que se “parapeta” el  codicioso  pajarraco para ser Congresista de la República, ese “CAMBIO” no es bueno; por analogía  con la historia relatada hace más de 30 años,  las hormiguitas laboriosas que hicieron el civismo  puro, poco a poco fueron reeemplazadas por el gran negocio de los politicos manilargos, como los que hoy nos tienen en manos de unos  parásitos que no tiinen ni idea de como nació y creció esta ciudad, hasta que llegaron los  que vendieron  las empresa públicas a menos precio, casi regalaron el  aeropuerto, embolataron el zoologico y  convirtieron la movilidad, el espacio público y el  servicio el ciudadano en su propia riqueza; por ese “CAMBIO”  Tan podrido, por ese, es que no  vale  la pena  Votar en marzo  próximo; ese “CAMBIO” NO ES PARA MEJORAR.  Por  que en su manos  ésto se les pudrió.

Ahí les quedo