El desprecio por la vida

Por FERLEY HENAO OSPINA

ferleyhenao@gmail.com

La muerte de 9.000 personas y el contagio de 360.000 adicionales son las crudas cifras estadísticas que arrojan las demoras en el proceso con las que el gobierno colombiano ejecuta las compras de la vacuna para protegernos del Covid-19. ¿Indolencia? ¿Negligencia? ¿Desidia?

Decepcionante, por decir lo menos porque irrita observar el desprecio por la vida que se expresa en esas actuaciones pese a los resultados crecientes que en promedio registran 150 muertos diarios, 4.500 muertos mensuales por cuenta del Covid-19. Como que no les importa y en cambio, al clamor ciudadano para que Colombia comience pronto a vacunar, la respuesta es una comedia: “Comprar vacunas no es como comprar pan o leche”. Qué cinismo.

México está vacunando desde el 24 y Chile desde el 31 de diciembre. ¿Ellos compraron leche y pan? Y ¿eso es lo que les están vacunando a mexicanos y chilenos?  No sean tan ridículos.

Los datos anteriores, sin considerar que después de Brasil, Colombia es la que peor ha manejado la pandemia en América del Sur: 1.8 millones de casos, Argentina 1,7 millones, Perú, 1,03; Chile 0,645, Véase el gráfico elaborado con las estadísticas Google a enero 12 de 2021.

Y sin tener en cuenta que no se paga oportunamente los salarios al cuerpo médico pero sí se le exige que trabaje, y las masacres, que se convirtieron en el pan de cada día a todo lo largo y ancho de la geografía nacional, se quedan impunes, poniendo de manifiesto una total negligencia, particularmente en aquellos asuntos que tienen que ver con la vida.

Con la información que hasta ahora ha dado el gobierno, Colombia solo podría estar comenzando a vacunar en febrero, dos meses de atraso con relación a nuestros vecinos latinoamericanos. Pero ha tenido que intervenir hasta la Contraloría General de la Nación para empujarlos a que hagan su trabajo: Comprar la vacuna.

Hasta este momento no hay ningún contrato cerrado si nos atenemos a lo que dijo el presidente a los medios por los fuertes debates que se dieron ante el anuncio del ministro de salud afirmando que ya estaban firmados pero que no podía publicarlos por los rigores de la confidencialidad. En todo caso, no era cierto, y el presidente anunció que en los próximos días se suscribirán contratos para 29 millones de vacunas.

¿Quién va a responder por esos 360 mil contagiados y esos 9 mil muertos?

Como todo en nuestro querido y sufrido país, esperamos que se produzca la catástrofe y después nos hacemos los que no entendemos, como que no es con nosotros. Así, con avisos previos y todo, se le dio tiempito al Nevado del Ruiz y enterraron 25 mil personas en Armero. Cuando se produjo el desastre del Portal de la Villa que dejó 4 muertes y sin casa a 233 familias, pese a que era una tragedia anunciada, el alcalde salió a los medios a decir que fue que llovió mucho, como si en Pereira nunca lloviera.

Si 10 meses completos que llevamos con la calamidad de la pandemia haciendo estragos en vidas, en salud, en la economía, en lo social, en todo, no han sido suficientes para prepararse a comprar las vacunas y los países vecinos sí pudieron hacerlo y ya las están aplicando con dos meses de anticipación, entonces “apague y vámonos” aquí lo único que podemos decir es: ¡Qué desprecio por la vida!