El profesor español Agustín de la Herrán Gascón, refiriéndose a la ciencia de la pedagogía, sustenta la validez de la educación prenatal como el inicio de los procesos educativos, así como lo hacen las ciencias médicas, biológicas y de la salud, que permiten intervenciones de alta complejidad intrauterina, incluyendo algunas de procedencia genética.
Otros investigadores se refieren a la psicopedagogía desde el periodo prenatal, para demostrar la incidencia del individuo en su relacionamiento social a lo largo de su vida; explicando la influencia inconsciente de los padres, mucho más allá del amor y de sus propósitos de formación conscientes.
Siendo así, la educación parte desde el mismo momento de concebir los hijos, activándose los determinantes de la salud emocional, física, psíquica y mental.
El proyecto de reforma a la Educación que prepara el gobierno para ser presentado al Congreso de la República, tiene un avance importante en cuanto que los seis procesos formales de educación continuada, se inician desde cero a tres años de edad y así, por etapas y rangos de edades, los ciclos se extienden desde la primera infancia y se van relacionando desde el ser, el saber, el hacer, y el saber hacer hasta llegar a la educación superior.
Esta es la oportunidad de correlacionar los alcances de este proyecto de ley con el de la salud, en su interacción con la educación, en aspectos fundamentales como la educación prenatal y desarrollo del ser en los entornos de la familia y sus grupos de convivencia.
Si los ecosistemas de salud y educación, se juntan y son concurrentes en el desarrollo continuado de la sociedad, la calidad y pertinencia, se conectan desde el vientre de la madre con las artes, la cultura y al carácter investigativo, innatos todos ellos, en los niños desde el momento de nacer, cuando se activan los sentidos de la música, la pintura, la exploración, el descubrimiento.
Jean Piaget y Reggio Emilia son referentes de las escuelas del ser, que proyectan el saber cómo una consecuencia derivada del contacto perceptivo y sensitivo en los entornos familiares, culturales, artísticos, y de la naturaleza, con los que crecen los niños en ambientes de salud psico-social, emocional y sicológica; impulsores determinantes en su formación integral.
Así lo ha comprendido y asumido Comfamiliar al interconectar los ecosistemas de salud y educación desde las madres gestantes hasta los adultos mayores , en todos los ciclos de vida de las familias afiliadas y comunidad en general, a través de sus programas de prevención, primera infancia, preescolar, atención integral a la niñez, jornadas escolares complementarias, primaria, secundaria, técnicos, técnicos laborales, artes, oficios, reinserción laboral, tecnólogos y profesionales .
El Liceo Educa, El Instituto Comfamiliar, La Universidad Comfamiliar y el Área de Cultura, se encadenan con la investigación a través de programas pertinentes con los de Salud Comfamiliar: preventivos, psicosociales y asistenciales, creando un entretejido sistémico de salud y educación desde el mismo momento en el que se inicia el proyecto de vida de sus afiliados beneficiarios.
El impacto de Comfamiliar en el desarrollo de nuestra sociedad, con equidad social y generando valor público, se ve reflejado en los más de 32.000 estudiantes que anualmente se forman para la vida, en sus centros ecosistémicos integrados.
Lo anterior, es otra de las razones para comprender porqué Comfamiliar Risaralda es el principal patrimonio social del Departamento, y porqué es el más potente canal de redistribución social compensatorio de los recursos, en el entendido que los ingresos recibidos de las empresas afiliadas, denominados parafiscales, son el 50% de los ingresos totales; los otros recursos provienen de sus actividades voluntarias – que no son de obligatoriedad legal – que como empresa privada, participa abiertamente en un mercado competitivo de oferta y demanda, abierto a toda la comunidad representada en cerca de 500.000 Risaraldenses que demandan sus diferentes servicios .
Si se tratase de evaluar en la práctica, el alcance cruzado de los proyectos de salud y educación, Comfamiliar Risaralda es un referente, que bien podría convertirse en una prueba piloto a desarrollar.
Maurier Valencia H.
Mi Dr.
Mis respetos. Sus comentarios, sus notas, sus opiniones, llenas de conocimiento de causa, de datos, de solidez y verdad, no solo le aclaran a uno còmo van las empresas y la sociedad, sin hacer escàndalo ni terremotos, se conciben con una suavidad intelectual propia de quién sabe del tema. Cada vez me sorprende màs.
Gracias por habernos dado tanto.
Gracias por darnos tanto.
Abrazos.