El anuncio de otra reforma tributaria por parte del gobierno nacional ha despertado una gran preocupación en diferentes sectores. Igualmente, ha motivado el análisis de la estructura tributaria para evaluar si es necesario o no gravar nuevamente a los contribuyentes para resolver la difícil situación fiscal que enfrenta el país.
Uno de esos es análisis lo realizó el Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana. De acuerdo con las últimas cifras del observatorio, por cada 100 pesos que debería recaudar el Estado colombiano, 50 los deja de percibir como consecuencia de la suma de diferentes tipos de beneficios tributarios.
Esa cifra debilita cualquier iniciativa que pretenda solo aumentar el recaudo vía más impuestos o mayores tasas. Sí no se perdieran casi el 50% de los ingresos por cuenta de los beneficios tributarios las finanzas del país estarían en otra situación.
El informe del Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana ilustra muy bien la situación y el punto central del debate que debe tener la iniciativa de una nueva reforma tributaria. El costo fiscal de los beneficios tributarios supera en más de seis veces los recaudado por la reforma tributaria del año 2022.
En el año 2023 aunque el país logró una cifra histórica de recaudo equivalente al 16% del Producto Interno Bruto (PIB), una gran proporción de ese esfuerzo se perdió por cuenta de las exenciones, deducciones y tratamientos preferenciales que equivalen al 8,7% del PIB. Según el Observatorio la pérdida anual ha fluctuado entre el 7 y el 9% del PIB.
En Colombia el problema de fondo no es solamente el monto de las exenciones, sino su falta de utilidad. Las preferencias tributarias no responden a un objetivo estratégico de desarrollo. De acuerdo con el informe del Observatorio Fiscal esos beneficios han respondido más al lobby para defender intereses particulares del 10% de las empresas con mayores ingresos en el país que acceden al 90% de los descuentos tributarios.
En suma, la próxima reforma tributaria debe enfocarse en una revisión integral de los beneficios tributarios para eliminar tratamientos preferenciales regresivos y no en subir más impuestos a los colombianos.