En estos días las reformas propuestas por Petro (algunas de ellas verdaderas utopías, como ”La Paz Total”) generan grandes debates, se siente la tensión entre gobernantes y opositores, lo que seguramente no causará una nueva guerra civil, como ocurría en el pasado, ni originará una nueva Constitución.
El siglo XIX fue para nuestra nación una época de permanentes guerras civiles. ” Entre 1812 y 1886 Colombia sufrió nueve guerras civiles de alcance nacional. Además hubo otras menores de caracteres regionales e innumerables revueltas” (es.m.wikipedia.org.) Entre sus causas pueden citarse: sectarismo político; injusticia social y política; la ambición de los caudillos y los partidos políticos.(Nota 1).
La primera guerra civil se dio entre Federalistas de las Provincias Unidas de la Nueva Granada comandados por camilo Torres, y los Centralistas del Estado libre de Cundinamarca liderados por Antonio Nariño entre 1812 y 1815; siendo derrotados los Centralistas en Ventaquemada el 2 de Diciembre de 1812, los federalistas atacaron Santafé el 9 de Enero siguiente, la batalla favoreció a las fuerzas de Nariño; el conflicto se paró y los dos bandos acordaron unir fuerzas contra los realistas en el sur, Nariño avanzó y tomó Popayán, luego fue derrotado en Pasto, capturado y enviado a España.
Sin el mando de Nariño, Bolívar tomó Santafé el 12 de Diciembre de 1814 a nombre de los Federalistas de Tunja. En Enero del año siguiente Bolívar viaja a Cartagena para recibir pertrechos y atacar a la realista Santa Marta e ir a liberar a Venezuela; el gobierno de Cartagena a pesar de ser independentista no lo apoyó, y Bolívar sitió la ciudad durante mes y medio; siendo atacado por los realistas samarios y sabiendo de la llegada de Morillo a Venezuela, Bolívar entregó el mando y se fue a Jamaica, sus tropas participaron en la defensa de Cartagena contra el asedio de Morillo, pero fueron derrotados por él. Éste conflicto ocurrió luego de la primera independencia en 1810, época llamada la Patria Boba, pues en vez de sumar fuerzas contra España, los bandos se dedicaron a pelear entre ellos, permitiendo la retoma española del país.
La guerra de los conventos 1839 – 1842: inició en Pasto el 30 de Junio de 1939, un grupo de sacerdotes se oponían a disolver los conventos de menos de ocho religiosos, orden que había aceptado el Arzobispo de Bogotá, los pastusos fueron derrotados en la batalla de Buesaco dos meses más tarde. En Julio de 1840 el alzamiento se recrudeció, pues al poco tiempo de haber aceptado José María Obando someterse al gobierno de Márquez para ser juzgado por el asesinato de Sucre ocurrido en 1830, se fugó de la cárcel e inició un alzamiento aduciendo falta de garantías procesales; la rebelión del máximo jefe santanderista fue aprovechada por otros caudillos antigobiernistas para generalizar la guerra, estos caudillos se denominaban jefes supremos de sus ejércitos, de ahí el nombre de “Guerra de los supremos”, buscaban derrotar a Márquez y reubicar a los militares santanderistas en la distribución del poder, por carecer de dirección única, los alzados fueron derrotados en 1841, y Obando huyó al Perú. Una consecuencia de ésta guerra fue la constitución de 1843 que extremó el régimen centralista y debilitó las autoridades regionales.
Guerra civil de 1851: La iniciaron terratenientes conservadores caucanos contra las reformas liberales de José Hilario López, quien proclamó la libertad de los esclavos en 1851 (la libertad de vientres de 1821 había sido evadida por los esclavistas); expulsó a los Jesuitas, suprimió la pena de muerte, la prisión por deudas, consagró la libertad de prensa y el juicio por jurados. En Mayo de 1851 los rebeldes se pronunciaron en el Patía y Timbío, Julio Arboleda intentó tomarse Pasto pero fracasó, se dieron otros levantamientos en Antioquia, Sogamoso, Mariquita, el Guamo y Guatavita, el gobierno liberal nombró a José María Obando jefe del ejército del sur y a Tomás Herrera comandante del Valle del Cauca, ellos aplacaron los enfrentamientos armados; capturan a Mariano Ospina Rodríguez, considerado el jefe de la rebelión, y los alzados se entregan al gobierno que en ese año los derrotó, se dio indulto a todos los combatientes, y los conservadores se vieron obligados a acatar las reformas liberales.
Guerra civil de 1854: Tras el golpe de estado del 17 de Abril de 1854 en contra del presidente Obando, el general José María Melo permaneció en el poder por ocho meses, hasta que el 4 de Diciembre de ese mismo año una alianza militar entre gólgotas y conservadores entró triunfante en la capital tras derrotar a las tropas melistas y sus aliados los artesanos; dichos artesanos presentaron una dura resistencia durante el asalto a Bogotá, razón por la cual los vencedores desterraron a centenares de ellos a las inhóspitas tierras de Panamá. En el enfrentamiento sobre las políticas librecambistas impulsadas por José Hilario López y José María Obando (1849-1854) se llamaba guaches a los hombres de ruana, generalmente artesanos de Bogotá opositores a esas políticas, y cachacos a los hombres de casaca, jóvenes estudiantes y políticos gólgotas-conservadores, defensores del libre cambio, ambos grupos tuvieron enfrentamientos callejeros en varias ocasiones; con el tiempo el primer apodo se le siguió aplicando a personas de maneras toscas y el segundo a las elegantes y distinguidas (Nota 2). César Gaviria con la apertura económica y Álvaro Uribe con el T.L.C. con USA, hicieron realidad los postulados librecambistas que siempre anhelaron grandes capitalistas internacionales.
Guerra civil de 1860 -1862: fue la única guerra civil del siglo XIX en que ganaron los insurrectos: Se inició en Santander y luego se extendió al Cauca cuando los liberales tomaron las armas contra el gobierno nacional presidido por el conservador Mariano Ospina Rodríguez; aunque el presidente del Cauca Tomás Cipriano de Mosquera inicialmente fue derrotado, con el apoyo de los liberales radicales entró a Bogotá, tomó el poder y proclamó una nueva Constitución en 1863, la de Rionegro que extremó el federalismo al establecer la soberanía absoluta de los estados en lo relacionado con su régimen interno y salvaguardar el orden público; este cambio significó más conflictos regionales y más inestabilidad, en esa época el país se llamó Estados Unidos de Colombia.
La guerra civil de 1876- 1877: En Julio de 1876 los conservadores se levantaron contra el gobierno radical de Aquileo Parra, para detener la educación laica y las demás medidas “anticatólicas”. Ésta guerra unió de manera temporal a las facciones radical e independiente del partido liberal. Julián Trujillo triunfó en el Cauca y Antioquia y así aseguró la presidencia para los independientes entre 1878 y 1880, lo que permitió la regeneración de Núñez. Durante ésta guerra civil se dio el nombre de Mochuelos a una guerrilla conformada por Jóvenes conservadores de la élite bogotana, que operaba en el caserío El Mochuelo, cerca del salto del Tequendama y Alcanfores a los liberales, también de clase alta que integraron el batallón gobiernista Alcanfor para defender a Bogotá de los ataques de los Mochuelos (Nota 3).
Guerra Civil de 1885: La iniciaron los radicalistas en Santander y Cundinamarca, por el desconocimiento de los Nuñistas del triunfo electoral radical en Santander, tras una corta los alzados en armas fueron derrotados y Núñez proclamó terminada la era del radicalismo. Esta derrota liberal dio paso a la constitución de 1886: centralista, presidencialista y católica que nos rigió hasta 1991.
Guerra civil de 1895: Iniciada en Enero de este año por el sector guerrerista del partido liberal en Bogotá, que fracasó en su intento de golpe a Miguel Antonio Caro, aunque pretendía convertirse en una insurrección general, se quedó en un levantamiento de poca significación y por esa razón en solo 60 días el gobierno conservador pudo derrotarlos fácilmente en las batallas de La Tribuna, Cundinamarca y El Encino y Capitanejo en Santander.
La Guerra de los Mil Días, 1899-1902: Fue la última guerra civil del siglo XIX y el último intento del sector del liberalismo radical para recuperar el poder. Fue un largo enfrentamiento irregular, que salvo al principio no involucró grandes ejércitos, que desgastó al partido liberal en pequeñas luchas, solo triunfaron en Panamá. La guerra prácticamente terminó en empate, negociado en los tratados de Neerlandia y el Winscosin, Marroquín continuó gobernando y Rafael Reyes regresó al poder a un sector del liberalismo en 1904. Una consecuencia nefasta fue la perdida de Panamá.
Como puede verse en éste repaso de la historia nacional, siempre los grandes capitalistas se opondrán a las reformas en favor del pueblo trabajador, usando incluso argumentos falaces.
Notas.
1- Este artículo se basa en la obra “1.001 cosas sobre la historia de Colombia que todos debemos saber” Eugenio Gutiérrez C. y Miguel Ángel Urrego A. Círculo de Lectores, Intermedio Editores, Santafé der Bogotá, Colombia 1995.
2-3 Obra citada, página 12 numerales 10 y 11.