Existen dos conceptos originales desde la teoría de la relatividad general, uno de ellos llamado, los agujeros negros entidades bien fundamentadas y observabas en el cosmos, mientras que los agujeros gusano permanecen como fascinantes posibilidades teóricas que aún esperan confirmación experimental. La investigación continúa en ambos frentes, con la esperanza de algún día comprender mejor estos fenómenos extremos del universo.
Aunque ambos se relacionan con la curvatura extrema del espacio-tiempo, tienen características y propiedades distintivas. Un agujero negro es una región del espacio-tiempo donde la gravedad es tan fuerte que nada, ni siquiera la luz, puede escapar de él. Se forma típicamente por el colapso gravitacional de una estrella masiva al final de su vida. Aunque los agujeros negros no pueden observarse directamente, su presencia puede inferirse mediante efectos gravitacionales sobre la materia circundante y la radiación electromagnética, como el efecto de lente gravitacional y la radiación de acreción. Los agujeros negros han sido observados y confirmados indirectamente mediante varios métodos astronómicos.
Un agujero de gusano es una hipotética estructura del espacio-tiempo que actúa como un túnel conectando dos puntos separados del universo. Se basa en soluciones de las ecuaciones de campo de Einstein que permiten tales conexiones. Un agujero de gusano tendría dos bocas conectadas por una garganta. Las bocas pueden estar separadas por vastas distancias espaciales o temporales. Para mantener un agujero de gusano estable y abierto, se requiere materia exótica con densidad de energía negativa, lo que aún no se ha observado en la naturaleza. Hasta la fecha, no hay evidencia observacional de agujeros de gusano. Su existencia sigue siendo puramente teórica y especulativa. Los agujeros de gusano siguen siendo teóricos y no han sido observados.
Los agujeros negros son regiones del espacio-tiempo con una singularidad y un horizonte de eventos. Los agujeros de gusano son hipotéticas conexiones entre diferentes regiones del espacio-tiempo que podrían permitir el viaje entre ellas. Los agujeros negros no requieren materia exótica para existir. En el centro de un agujero negro, la curvatura del espacio-tiempo se vuelve infinita, y las leyes de la física tal como las conocemos dejan de aplicarse.
Los agujeros de gusano, según la teoría, requieren materia exótica para mantenerse estables y abiertos. Los agujeros negros actúan como trampas gravitacionales. Los agujeros de gusano podrían, en teoría, permitir viajes a través del espacio y el tiempo.
Einstein se equivocaba cuando decía que ‘Dios no juega a los dados con el universo’. Considerando las hipótesis de los agujeros negros, Dios no solo juega a los dados con el universo: a veces los arroja donde no podemos verlos. Los agujeros negros no son las cárceles eternas que se pensaba eran. De un agujero negro pueden salir cosas, hacia el exterior y, posiblemente, hacia otro universo. Así que, si sientes que estás en un agujero negro, no te rindas; hay una salida. Solo somos una raza de primates en un planeta menor de una estrella ordinaria, pero podemos entender el universo. Eso nos hace muy especiales. Stephen Hawking
Padre Pacho